El aparente fin de la crisis ha puesto también el punto y final a la tendencia a la baja en las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), responsables del Cambio Climático, registrada en la Comunitat Valenciana.

Entre 2013 y 2015, las emisiones aumentaron tanto en los sectores controlados —empresas obligadas a declarar sus emisiones, entre las que se encuentran cementeras, cerámica, eléctricas, etc—con un 12,52%, como en el total que incluye a los sectores difusos cuando pasó de 25.538 kilotoneladas de dióxido de carbono equivalentes (CO2) a 25.696 kt, con un incremento mínimo, pero incremento, del 0,5% entre 2014 y 2015.

El secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, presentó ayer un informe sobre las emisiones de GEI a la Comisión de Coordinación de Políticas del Cambio Climático, que participa en la revisión de la actual Estrategia Valenciana contra el Cambio Climático 2013-2020.

Según este informe, las 186 instalaciones valencianas sujetas al comercio de derechos de emisión han declarado 9.061.736 toneladas de emisiones de CO2 equivalentes en 2015 mientras en 2013 la cantidad lanzada a la atmósfera por las empresas obligadas a realizar su eclaración fue de 8.053.022. t, lo que representa un incremento del 12.52%, según la conselleria.

Las 186 instalaciones están incluidas en el Régimen de Comercio de Derechos de Emisiones, que obliga a presentar cada año un informe sobre sus emisiones avalado por una entidad de verificación independiente y acorde con el Plan de Seguimiento de las Emisiones que autoriza la dirección general de Cambio Climático y Calidad Ambiental de la Generalitat Valenciana.

El sistema de asignación de derechos permite otorgar a cada una de las empresas beneficiarias una cuota de emisión gratuita que se reduce año tras año para incentivar una producción más «verde» y evitar su fuga a países extraeuropeos donde los controles son más relajados. La empresa que se excede en las toneladas asignadas tiene que comprar en el mercado nuevos derechos mientras que la que a final de año está por debajo del límite puede poner a la venta los suyos.

En la Comunitat Valenciana, la asignación gratuita fue en 2013 de 7.623.460 toneladas mientras que en 2015 se limitó a 6.982.034, lo que supuso una reducción de un 8,5%. Las emisiones verificadas fueron en 2015 de 9.061.736, que al precio vigente en marzo de 2015 equivaldrían a derechos valorados en 44,5 millones de euros.

Como quiera que el volumen asignado se limitaba a 6.982.034 t, ha habido un desfase en las emisiones de 2.079.702 toneladas que las empresas valencianas emisoras de CO2 tendrán que compensar dentro de este mercado con un coste estimado de 10,2 millones de euros.

Respecto a los sectores difusos, no sujetos a este mercado, la conselleria sostiene que están disminuyendo en la Comunitat Valenciana. Sin embargo, el volumen total de emisiones, «controladas» más «difusas»,pasó de 25.538 kt. a 25.696 kt. interrumpiendo la tendencia a la baja que se inició en 2008, antes de la crisis, cuando se llegó a 32.619 kt.

Objetivos

Hasta 2020, la reducción de emisiones en los sectores sujetos a comercio de emisiones debería alcanzar un 21% respecto a las 2005. El objetivo, tras la cumbre de París, es una reducción del 43% en estos sectores y de un 30% en los difusos respecto a los niveles de 2005, cuando en la Comunitat Valenciana se estimaron unas emisiones totales de 32.514 kt.

Con este horizonte, el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, anunció ayer la creación de una Cátedra de Cambio Climático en la Universidad Politécnica de Valencia. Así lo anunció Álvaro durante la Comisión de Coordinación de Políticas del Cambio Climático convocada ayer coincidiendo con la firma de los acuerdos de la Cumbre de París y el día de la Tierra.

«La Estrategia Valenciana contra el Cambio Climático va a ser activada, dado que los gobiernos anteriores no lo hicieron, y revisada, para mejorarla y hacerla más realista y operativa», avanzó.