Ángel León es el único de sus tres hermanos que quiso ser guardia civil y con ello fue fiel a la tradición de una familia muy ligada al Instituto Armado, con siete generaciones consecutivas desde 1848. Ayer recibió un emotivo homenaje con la entrega de un diploma durante los actos de conmemoración de los 172 años de historia de la Guardia Civil en el cuartel de Cantarranas.
El hermano de Ángel, Pedro León, decidió no entrar al Instituto Armado, y es cuando, con 19 años, cogió el testigo y se convirtió en lo mismo que había sido su padre y antes su abuelo, su bisabuelo, su tatarabuelo, y su cuarto y su quinto abuelos. Una larga saga que comenzó en 1848, solo cuatros años después del nacimiento de la institución.
El subteniente Ángel tiene 52 años, 33 de los cuales los ha pasado en el cuerpo. Ha estado en distintos grupos del País Vasco, fue comandante de puesto en Torrevieja, estuvo destinado en la Comandancia de Alicante y en la actualidad trabaja en el Servicio de Información. También formó parte de Salvamento Marítimo donde confiesa que vivió alguna experiencia peligrosa. «Había pateras que llegaban llenas de inmigrantes que se amontonaban en un lado de la barca con el riesgo de que volcara y se ahogaran».
No obstante, reconoce que «la satisfacción de hacer el bien» es lo que le empujó a seguir la tradición de su familia. «Para mí, ayudar es lo normal», asegura emocionado mientras reconoce que con su abuelo y su padre en casa «era imposible no ser guardia civil». Todo un orgullo, admite. Y añade: «Tomar la decisión de ser guardia civil me ha cambiado la vida, aunque no sé si mi hijo seguirá con el legado».
Condecoraciones
Durante el acto conmemorativo se reconoció la labor de todos los agentes y se condecoró con la cruz con distintivo blanco del cuerpo a la fiscal delegada de la Fiscalía Antidroga de la Comunitat Valenciana, Carmen Sanz, a la fiscal de Seguridad vial en Valencia, María Teresa soler, al ingeniero industrial José Francisco Martínez-Canales, y a 18 oficiales, suboficiales y agentes del cuerpo.
La Comunitat Valenciana fue una de los primeras aut0nomías donde se desplegó, hace 172 años, el servicio de la Guardia Civil, que mantiene los valores que marcaron su origen, el de «permanente servicio a la sociedad» y sobre todo «a los más débiles», y se enfrenta actualmente a nuevos retos y potencialmente «más peligrosos», como las amenazas por Internet y el terrorismo internacional, tal como señaló el general jefe de la sexta zona de la Guardia Civil, Fernando Santafé. Al acto, que también asistieron el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Pilar de la Oliva, y el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias de la Generalitat, José María Ángel.
