Un grupo de interinos de educación que no han consolidado su plaza -es decir, que aún no han tenido la oportunidad de trabajar en la enseñanza pública- se manifestaron ayer en la plaza del Ayuntamiento de Valencia y en Alicante. Los docentes se han visto afectados por una decisión judicial que obliga el Consell a aplicar una normativa de 2010, por la que el orden de la bolsa de trabajo será decreciente. Es decir, cuando se realice la prueba de 2016, todos aquellos que se hayan presentado en 2015 o años anteriores y no hayan consolidado su plaza se verán superados en la lista por los recién examinados. Los afectados muestran su «descontento ante esta situación injusta», y recuerdan que las condiciones en vigor cuando se examinaron apuntaban que «mantendrían de manera indefinida su posición en la bolsa». Las concentraciones se convocaron tras recibir la negativa del Consell a revertir la situación.

Desde la Conselleria de Educación apuntan a que las reuniones con el colectivo han sido numerosas y que se trató en la mesa sectorial. No obstante, consideran que la Administración tiene «muy poco margen para actuar» por la sentencia judicial y porque los sindicatos «no se muestran unánimes». Además, reconocen que un cambio afectaría a más gente que a la que beneficiaría.

Los interinos sin servicios acusan a sindicatos y administración de «mirar hacia otro lado».