La segunda sesión de comparecencias de la Comisión de Investigación del caso Taula fue un de-sierto. Ninguno de los 6 dirigentes del PP citados a declarar tuvo a bien pasar por la Sala de Juntas del Ayuntamiento de Valencia donde se llevan a cabo los trabajos, una de ellas la exalcaldesa Rita Barberá, que apenas un cuarto de hora antes de la cita hizo llegar un escrito confirmando su incomparecencia en una comisión «inoportuna en el tiempo» y «políticamente intencionada».

Los citados ayer eran la propia Barberá; la exconcejala María José Alcón; la secretaria del Grupo Popular, Carmen García Fuster; el concejal Alfonso Novo; la funcionaria María José Pi; y la gerente y tesorera del PP nacional, Carmen Navarro. Alfonso Novo envió su declaración ante el juez y se disculpó asegurando que no había nada más que decir. Y Carmen Navarro alegó que los asuntos del Grupo Popular no son de su competencia. Ni siquiera María José Pi, que estaba obligada por ser funcionaria, acudió a la cita al estar de baja médica.

La única de la que no había noticias era de Rita Barberá, que estaba citada a las 12 horas, así que los miembros de la comisión, que abrieron la mesa a las 9 de la mañana, esperaron hasta esa hora para ver qué pasaba. Y lo que pasó fue que un cuarto de hora antes de la cita, Barberá hizo llegar un escrito en el que anunciaba que no acudiría. Tras recordar que «no está probada la comisión de ningún delito» y que no está obligada a comparecer, comunicaba que no participará en una comisión «a todas luces inoportuna en el tiempo y políticamente intencionada».

Esta decisión provocó la indignación de todos los partidos, hasta el punto de que la portavoz socialista, Sandra Gómez, propuso redactar una declaración de reprobación firmada por todos los grupos, idea que salió adelante con la abstención del PP.

Todos contra Monzó

Su portavoz, Eusebio Monzó, trató de justificar las ausencias recordando que la comisión se aprobó antes de iniciarse las declaraciones ante el juez; que posteriormente el magistrado dejó claro que no había perjuicio para las arcas municipales; y que „esta fue la novedad„ tampoco el juez había aceptado al Ayuntamiento de Valencia como acusación popular, ya que «ninguna administración puede arrogarse una acción pública penal con la excusa de su posible conexión con alguna de sus competencias».

Pero estas declaraciones no hicieron sino aumentar el malestar. Carlos Galiana no entiende que Barberá no comparezca después de 24 años de alcaldesa y «en los próximos días la veamos pidiendo el voto y confianza». Es más, «el señor Novo sigue siendo regidor», dijo, lo que significa que el PP «trinca la pasta de la nómina y si te he visto no me acuerdo».

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, aseguró que al no comparecer la tesorera del PP, «Rajoy ha respaldado a Rita Barberá». También Sandra Gómez calificó al PP de «partido antisistema» por no respetar las instituciones. Y Jordi Peris, de València en Comú, habló de «plantón en toda regla».