La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, denunció ayer que el retraso en las obras de construcción del tercer carril del Corredor Mediterráneo es «totalmente inadmisible» y reclamó una «mejora radical» en las inversiones del Estado en los puertos de Valencia, Alicante, Castelló y Sagunt.

«Cada día sin Corredor supone una pérdida de competitividad para nuestras empresas, una menor rentabilidad de nuestros productos, una saturación de la red viaria con mayores costes ambientales», lamentó, lo que relacionó con «menores niveles de seguridad vial, menos oportunidades para los valencianos y una renta per cápita más baja».

En su intervención en el Propeller Club de Valencia, subrayó la importancia del Puerto de Valencia, «el primero de España y del Mediterráneo en tráfico de contenedores», y aludió a la situación de las instalaciones portuarias de Sagunt y Castelló, «en el centro de la fachada mediterránea y en los ejes de comunicación natural con Francia y con el Valle del Ebro».

Sobre el Corredor Mediterráneo, Salvador denunció que «el Estado no le presta la atención que merece ni le dedica los fondos presupuestarios que debería», ante el «gran» retraso en la implantación del tercer hilo «cuando el Gobierno dijo que se ahorraría tiempo y coste» y el hecho de que «todavía se desconozca la fecha de finalización de las obras».