Los directores de los colegios públicos no están por someter a sus alumnos de sexto a una prueba de dos días con más de 200 preguntas como exige el ministerio en virtud de la Ley de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce). Por eso el colectivo «agradece la alternativa a la reválida» que plantea la Conselleria de Educación, señaló ayer Vicent Ripoll, presidente de la Associació de Directors d'Infantil i Primària (Adip-PV). «El 99 % de colegios públicos hará el informe individualizado de evaluación continua final que propone la conselleria en lugar del examen», añade.

La conselleria, como avanzó ayer Levante-EMV, facilitará el próximo seis de junio a los colegios que lo pidan un modelo de examen con las directrices del Ministerio de Educación para que entre el 7 y el 17 de junio realicen las pruebas.

Ripoll califica de «innecesario» dicho examen extraordinario, «porque la adquisición de competencias que pretende medir se hace mejor y con más profundidad en la evaluación ordinaria, donde el tutor valora el trabajo que ha hecho durante todo el curso su alumno».

Las cooperativas de enseñanza concertadas están en la misma línea. Luiso Cervellera, presidente de la Unión de Cooperativas de Enseñanza Valenciana (UCEV) considera «fenomenal» la alternativa introducida por la conselleria. «Estamos en contra de la Lomce y de las pruebas censales que tienen que hacer todos los alumnos». Añade que la opción del informe emitido por el tutor «da valor al trabajo que hace el profesorado y sentido a la evaluación continua». Cervellera no cree que haga la prueba del ministerio ninguno de los 30 colegios de Primaria de la UCEV.

Escuelas Católicas de la Comunitat Valenciana (Escacv), patronal que agrupa a los colegios diocesanos y de las congregaciones religiosas, reclama al conseller Vicent Marzà un informe jurídico sobre la legalidad de su alternativa. «Extraña que conselleria deje en manos de los colegios la decisión de cumplir la ley, pues nos da a elegir entre algo que es legal y otra cosa que no sabemos lo que es», sostiene Vicenta Rodríguez, presidenta de Escacv.

«Es complicado hacer el examen»

No obstante, Rodríguez admite que si conselleria justifica que su propuesta se ajusta a la Lomce, «quizás muchos colegios concertados opten por que los tutores hagan el informe. «Es verdad que los tutores tienen mucha información y conocen a los niños y no sé en que medida una prueba con 200 preguntas puede aportar información nueva y enriquecedora», añade.

«Mi duda „prosigue la presidenta de Escuelas Católicas„ es si esta prueba extraordinaria es necesaria en lo pedagógico, ya que los tutores tienen bastante información de sus alumnos». Reconoce también que acometer una prueba de dos días a estas alturas de curso «es bastante complicado para los colegios y los tutores».