La Generalitat acaba de poner en marcha el complicado y continuamente aplazado proceso de limpieza del espacio radioeléctrico valenciano, donde la ilegalidad y la permisividad campa a sus anchas desde hace lustros. El primero de los repetidores sobre el que la Generalitat ha puesto la lupa es el de la urbanización Calicanto, en la Serra Perenxisa, en el término municipal de Torrent, y cuya torre emisora se ha convertido para los técnicos de la Generalitat en toda una concentración de ilegalidades.
El Consell acaba de apercibir a la empresa propietaria del centro emisor de Calicanto para que identifique a los 35 emisores, en concreto 26 de TDT y otros nueve de radio, que emiten desde este punto de forma ilegal. El poste emisor de Calicanto es legal, pero no así la gran mayoría de las emisiones que se realizan, que no tienen la preceptiva licencia administrativa.
Tras años de impunidad, el Consell está decidido a hacer cumplir la ley y a ejercer sus competencias de control e inspección, como ayer informó Levante-EMV. El Ejecutivo autonómico ha detectado que sólo desde Calicanto 35 de las 37 emisiones que se realizan son ilegales. En toda la Comunitat Valenciana operan sin el preceptivo permiso administrativo un total de 422 emisiones de radio y otras 114 de televisión digital terrestre.
En el requerimiento a la propietaria del repetidor se recuerda que la ley de la Generalitat que regula el sector audiovisual recoge que incurrirá en responsabilidad administrativa el prestador del servicio de telecomunicaciones, de transporte o difusión de la señal que no comunique la identidad del resto de emisores en sus instalaciones. Tanta avalancha de emisoras sin licencia convierte la oferta de la Televisión Digital Terrestre (TDT) en la ciudad de Valencia y su área metropolitana en un auténtico coladero de firmas piratas.
Completar el mapa de las TDT
El Consell asegura que no está dispuesto a mantener esta situación eternamente por lo que ha puesto en marcha un procedimiento de persecución de ilegalidades. Fuentes oficiales de la Generalitat aseguran que el procedimiento requiere tiempo porque para el cierre es necesaria una actuación conjunta con el Ministerio de Industria y los ayuntamientos donde están instalados los emisores. La intención es comenzar por la red de TDT ilegales y seguir después por las radios.
Se trataría de un proceso paralelo al de la adjudicación de las TDT, que ya ha encarado su última etapa para completar el mapa definitivo con el objetivo de profundizar en la limpieza de la oferta ilegal, ya que es la única forma de garantizar seguridad jurídica a las empresas que operan bajo concesión, que son las únicas que pueden operar, según reconocen fuentes de las Generalitat.
Las fuentes señalan que no tiene sentido que existan una serie de frecuencias legales „que han sido permitidas durante décadas sin que ninguna Administración haya iniciado procedimientos sancionadores„ pero que estas a su vez se encuentren rodeadas de flagrantes ilegalidades, de empresas que se hacen con un espacio de la torreta y empiezan a emitir y a las que es muy complicado perseguir hasta el punto de que se supere ya el medio millar en todo el territorio valenciano.
