El Pacte del Botànic está dejando ver sus ramas. El tronco era la determinación de tener y luchar por una educación y sanidad públicas pero estaba por ver cómo se iba a materializar este posicionamiento político. Primero fueron la retirada de becas públicas a las universidades privadas. Ahora se añade la exclusión de los alumnos de pago de Ciencias de la Salud de las prácticas académicas que se imparten en los hospitales de la red sanitaria pública.

Los convenios entre centros privados y hospitales públicos que hasta ahora los sustentaban están denunciados desde ayer mismo directamente porque «carecen de fundamentación legal», según denunció ayer la consellera de Sanidad, Carmen Montón, que compareció junto con sus homólogo de Educación, Vicent Marzà; el presidente de la conferencia de rectores de las universidades públicas valencianas y rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo y la vicepresidenta del consejo estatal de estudiantes de Medicina, Andrea García.

El Consell ha aprovechado la necesaria adaptación al real decreto 420/2015, aprobado por el Partido Popular y que busca reducir la masificación en las prácticas universitarias de Ciencias de la Salud estableciendo un único hospital para un único centro para poner en orden «la casa» y acabar con estas «flagrantes irregularidades» que se venían tolerando «con sorprendente normalidad».

Para ello, el Consell ha puesto sobre la mesa la ley 53/1984, de Incompatibilidades del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas para denunciar que profesionales de la red pública estuvieran siendo contratados por las universidades privadas para servir de tutores de esas prácticas en horario y centros «públicos».

Contrataciones anómalas

«La legislación es muy clara, la figura del tutor de prácticas está muy delimitada y solo tiene cabida en entidades públicas. Es anómalo que universidades privadas contraten a un profesional sanitario para impartir docencia durante su horario de trabajo y en un centro público», aseguró.

Los alumnos de Ciencias de la Salud que ya están matriculados podrán terminar sus carreras «sin problemas» gracias a un periodo transitorio pero no así los que se matriculen a partir del próximo curso en las universidades privadas de la Comunitat (Cardenal Herrera-CEU, Universidad Católica de Valencia y Universidad Europea).

Según concretó ayer Montón, los alumnos afectados serán los de Medicina, Enfermería, Farmacia, Fisioterapia, Biotecnología y Psicología Clínica.

En este periodo transitorio, los estudiantes matriculados con anterioridad al curso 2016-2017 podrán hacer sus prácticas en hospitales privados o en hospitales públicos pero gracias a nuevos acuerdos de colaboración que se deberán firmar, en este caso, entre universidades y que podrían incluso conllevar compensaciones económicas, según se apuntó ayer. Una vez acabe este periodo transitorio, los alumnos de pago solo tendrán como posibilidad para completar su formación los hospitales privados con categoría de universitarios.

Montón concretó que son, mayoritariamente, todos los que están bajo concesión privada ahora menos el de Manises (Alzira, Elx, Torrevieja y Dénia) y algunas especialidades en el Nou d'Octubre. La consellera entiende que los centros son «suficientes» para absorber la demanda de los centros privados.

La adaptación al marco legal de las prácticas -por aplicación del real decreto de 2015- supondrá acabar con la actual masificación y dotarlas «de más calidad», según destacó Marzà que al tiempo recordó que se dará una mejor atención al paciente y se respetará más su intimidad.

Para decidir los nuevos conciertos se creará una comisión mixta entre Educación y Sanidad y la distribución territorial será una de las pautas a seguir para «emparejar» a cada universidad pública con un centro en concreto.

Sin registro de estudiantes

Lo que no supieron responder ni Montón ni Marzà es cuántos alumnos están afectados directamente por la medida ya que, tal como aseguraron, los conciertos denunciados no estaban registrados en la conselleria «competente que es Educación» por lo que no existe un registro exacto ni de estudiantes ni de profesores con acuerdo con las privadas.

Los nuevos conciertos dejarán fuera la posibilidad de aplicar tasas a los alumnos de pago que sigan en hospitales públicos, tal como se apuntó en la Proposición No de Ley aprobada en su día en les Corts ya que, simplemente, la ley deja fuera la posibilidad de continuar con esta vía mixta.

El conseller de Educación rechazó que esta nueva decisión vaya a suponer un recrudecimiento de la campaña de la educación concertada contra el Consell con motivo del arreglo escolar «porque estamos en cumplir la ley, lo que se le supone a cualquier gobernante» y, a su entender, no suponía una medida «electoralista».