Mientras se produce la escisión que dé lugar al nuevo banco y se negocia una ficha bancaria para el mismo, el Instituto Valenciano de Finanzas ha puesto ya en marcha varias líneas de financiación que van a marcar el camino de cuál será la actividad de la futura entidad.
El dinero que pondrá a disposición de las empresas asciende a 75 millones de euros, que tendrán un impacto añadido de otros cien millones. En conjunto, por tanto, 175 millones. Se trata de seis línea sectoriales de crédito financiadas con capital del IVF por un total de 45 millons y un impacto de 90. Van dirigidas al sector agroalimentario (10 millones), el turístico (10), la economía social (5), la internacionalización (10), el emprendimiento innovador (5) y otros cinco millones en microcréditos para autónomos y microempresas. En este último caso, se podrán beneficiar firmas de nueva creación, aunque se requerirá una aportación mínima de recursos propios equivalente al 20 % del proyecto a financiar. Los precios en todos los casos son similares a los que ofrece la banca privada.
Todo esto se complementará con cinco instrumentos financieros con fondos europeos por valor de 30 millones y un impacto de 85. Mediante capital riesgo-semilla, préstamos participativos y subordinados y capital riesgo expansión, este dinero se destinará a empresas con un marcado perfil innovador y exportador.
Asimismo, la entidad dedicará una atención especial al sector audiovisual, que, tal como dijo el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se encuentra en «un momento clave», con la próxima reapertura de Canal 9
Illueca explicó que el objetivo es «reafianzar a Crea SGR en las garantías otorgadas a las empresas valencianas» de este ámbito «en el marco de las operaciones financieras suscritas para anticipar subvenciones concedidas y, en general, ingresos por contratos celebrados con Culturarts y la Dirección General de Comunicación de la Generalitat».
