La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ha logrado convencer a los principales sindicatos del ámbito de la Función Pública para que den el sí al acuerdo de legislatura con el que el Consell de Ximo Puig quiere garantizarse cierta paz social. El documento, cuyo contenido fue avanzado en su día por Levante-EMV, recoge una serie de mejoras para los funcionarios que van desde la ampliación de los permisos por paternidad hasta compromisos para la convocatoria de ofertas de empleo público en los próximos tres años.

Así, se ampliará a seis semanas el permiso de paternidad y permisos retribuidos para las madres a partir del primer día de la semana 27 del embarazo. El acuerdo incluye también la promesa de mejoras retributivas para que el funcionariado pueda recuperar el poder adquisitivo perdido y, en concreto, se plantea la creación de un Fondo Compensatorio Extraordinario el año que viene. En un primer momento, los sindicatos rechazaron firmarlo por su inconcreción en los aspectos retributivos. Intersindical pidió que figurara expresamente la introducción del requisito lingüístico para el acceso a la función pública, una alusión que no aparece en el documento, aunque en principio es uno de los aspectos que abordará el comité de sabios que estudia la reforma de la ley de la función pública valenciana.

El único requisito que han puesto los sindicatos para estampar su firma esta mañana es que el Consell se comprometa al pago del 50 % restante de la paga extraordinaria eliminada en 2012.

El acuerdo se firmará hoy, en vísperas de la campaña electoral y en medio de la tensión entre el Consell y el Gobierno central a cuenta de los recortes presupuestarios.