El acercamiento del tripartito a Ciudadanos en el camino hacia la reapertura de los medios de comunicación públicos en valenciano es la principal novedad del inicio del trámite parlamentario de la nueva ley de la futura Corporación Valenciana de Medios de Comunicación. Las Corts aprobaron ayer la toma en consideración del texto con los votos de los diputados de PSPV, Compromís, Podemos, el propio Ciudadanos y la abstención del PP.

Los partidos del Botànic aspiran a contar también con los populares para que la nueva televisión nazca del acuerdo de todos los grupos parlamentarios, pero de momento el PP sólo concede la abstención. Tampoco Ciudadanos extiende un cheque en blanco y advierte del peligro de una apertura sin que la nueva corporación esté preparada.

El diputado Toni Subiela teme las prisas del tripartito por abrir para el tercer aniversario del cierre, en el mes de noviembre, y cree que para esa fecha con mucha suerte se habrá nombrado al nuevo Consejo Rector, pero ve improbable que esté elegido el director general. «Hay demasiadas prisas por abrir», resume el diputado de Ciudadanos, a quien chirría que, por ejemplo el líder de Podemos fije la reapertura en noviembre, mientras la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, la sitúe en pruebas este mes.

Además, una de las líneas rojas para Ciudadanos es la de los privilegios de los extrabajadores que el borrador de la ley que abandera Podemos ha incluido como disposición adicional y que ya ha provocado roces y tensiones con socios del Botànic, especialmente el PSPV, que considera que el interés del partido que lidera Antonio Montiel de quedar bien con todo el mundo complica más que facilita el proceso.

En la cuestión de los extrabajadores, Montiel comenzó ayer a modular su discurso y anunció desde la tribuna que Podemos no tendrá problemas en autoenmendarse si es necesario ni en pactar una redacción más adecuada. El borrador actual de la ley recoge que los extrabajadores que accedieron a la antigua RTVV por oposición pueden quedar exentos de determinadas pruebas en el proceso de selección como reparación moral, lo que el Consell Jurídic Consultiu considera que no se ajusta a derecho. Además, el resto de partidos considera que el nuevo órgano directivo tiene que tener libertad para desarrollar la política de personal.

Por su parte, el portavoz de Compromís, Fran Ferri, sostiene que su formación trabajará para hacer compatible unos procesos de selección de personal objetivos, por mérito y capacidad, pero también para que se ponga en valor la experiencia de los extrabajadores, una posición a medio camino entre la de Podemos y la de PSPV o Ciudadanos.

La plantilla, «con el culo al aire»

El PP, por su parte, asegura que quiere formar parte del consenso pero reclama rigor y seguridad jurídica y cuatro informes de diferentes ámbitos: el Consell Jurídic Consultiu, la Dirección General de Presupuestos, la Abogacía de la Generalitat y el Consejo Económico y Social (CES).

Ayer, el diputado Jorge Bellver acusó al tripartito de dejar «con el culo al aire» a los extrabajadores de RTVV y reprochó a los partidos de izquierda que prometieran en campaña electoral la reapertura del ente y la readmisión de todos los extrabajadores cuando se abriera la nueva televisión.