La Conselleria de Sanidad ha transformado el expediente informativo abierto en el Hospital Clínico de Valencia, sobre las presuntas coacciones a una médica para que renunciara al puesto obtenido en la bolsa de trabajo, y ha elevado su grado hasta convetirlo en un «expediente disciplinario». Dicho expediente, avanzado ayer por la consellera de Sanidad, Carmen Montón, recae sobre el jefe de servicio de Anestesiología y la jefa de sección del mismo departamento, que fue quien hizo la llamada donde se escuchan las presiones para que la especialista renunciara a la plaza.

Hay otro frente se les plantea en el horizonte a los investigados. El Colegio de Médicos de Valencia anunció ayer que abrirá un expediente informativo para investigar las presuntas coacciones entre profesionales del Clínico. La entidad colegial iniciará un expediente informativo «sobre los hechos que están siendo objeto de atención mediática por si pudieran ser constitutivos de infracción del Código Deontológico, con independencia de otras actuaciones administrativas o judiciales». De resultar probados estos hechos en un expediente disciplinario colegial, «podrían constituir falta grave o muy grave, susceptibles de ser sancionadas con privación de la colegiación „lo que equivale a la prohibición de ejercer la medicina„ durante un tiempo que puede ser temporal o permanente». La investigación colegial se paralizaría en el caso de que hubiera un procedimiento penal sobre los hechos y hasta que éste finalizara.

Reunión de urgencia

Por otro lado, el gerente del Departamento de Salud de Valencia, Clínico y Malvarrosa ha enviado una nota a todos los jefes de servicio/unidad del departamento. «Por la presente nota, se le convoca, sin posibilidad de delegación por la importancia y urgencia del tema a tratar, a una reunión para el próximo día 13 de junio, a las 13.45 horas, en el salón de actos del Incliva, con el orden del día: Contrataciones».