El ex presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso, declara hoy como testigo en el juicio contra Enrique Crespo y su familia por, presuntamente, esconder un premio de la lotería del Gordo de 2011. Rus ha atendido a los medios antes de entrar en la Ciudad de la Justicia y ha vuelto a defender su inocencia en el Caso Taula y reiterado que las grabaciones donde aparece con su ex mano derecha, Marcos Benavent, son "un montaje y ya lo demostraré", cuando se levante el secreto del sumario en el que está imputado.

Durante su intervención ante los medios, Rus ha criticado que su partido no le haya "escuchado ni llamado" aún tras su detención e imputación por el caso Imelsa y ha añadido: "Imagino que tendrán todos los datos de que yo era, no sé, un maleante".

"De todas maneras, yo seguirá votando al PP" a pesar de que "me echaron sin respetar la presunción de inocencia. Aún me duele la patada que me dieron", ha anunciado al llegar a la Ciudad de la Justicia.

Rus declara hoy como testigo en la pieza separada del caso Emarsa que juzga a su exvicepresidente en la diputación, expresidente de esta empresa pública y exalcalde de Manises Enrique Crespo por la ocultación de un premio de doce millones de euros obtenido en el sorteo de Navidad de 2011.

En aquella jornada del "Gordo", Rus salió ante los medios de comunicación exultante junto a Crespo a las puertas de su despacho mostrando varios décimos premiados, "cinco", según ha señalado hoy ante los periodistas.

"Voy a ratificar lo que dije en su momento ante el juez: yo sé lo que me tocó a mí pero no lo que le tocó a él. A mí me tocaron cinco décimos", ha señalado el exdirigente del PP, quien ha reconocido que al enterarse por la televisión en su despacho de que había sido agraciado vivió un "momento muy alegre".

"Yo enseñé los décimos al salir de mi despacho por si alguien dudaba", ha añadido para reconocer que venía a testificar "con ansiedad de explicar las cosas".

Ha asegurado desconocer que en la Diputación de Valencia hubiera "zombis ni finiquitos", al ser preguntado por la pieza separada del caso Imelsa que investiga las supuestas contrataciones ficticias en la institución provincial y que el pasado día 15 archivó la causa respecto a siete de los trabajadores investigados por contratos ficticios e indemnizaciones, manteniendo la investigación (antes imputación) sobre Rus y otras veinte personas.

"Estaba todo auditado", ha remarcado para negar también que hubiera "descontrol" en la Administración provincial que presidía, recordar que el exgerente de Imelsa Marcos Benavent "se autoproclamó 'yonqui del dinero'" y defender que "solo uno" de los "doscientos jugadores" que han pasado por el Olímpic de Xàtiva (el club de fútbol que también presidía durante nueve años) cobró de Imelsa.

"Yo sé lo que hacía yo: salía a las 8 de casa y volvía a las 10 (de la noche). Nunca permitiría que ninguna persona cobrara sin trabajar", ha asegurado Alfonso Rus.

Preguntado sobre cómo se quedó en el momento de su detención, el pasado 26 de enero en el marco de la operación Taula del caso Imelsa, ha respondido: "Mal, mal. ¿Cómo puede ser que me detengan cuando yo me puse en contacto con Fiscalía cuando me enteré de esto?".

Ha anunciado que hará más declaraciones ante el juez y ha apuntado: "De cara a la opinión pública la presunción de inocencia en mi caso no ha habido ninguna y ya me defenderé".

"El partido (en alusión al PP), sin oirme, a mí me apartó. La presunción de inocencia está por encima de todo", ha criticado para señalar: "En mi caso no me han escuchado ni llamado, no me han dicho 'venga usted'; imagino que tendrán todos los datos de que yo era, no sé, un maleante".

En referencia a la grabación hecha pública hace unos meses donde supuestamente se le escuchaba contar dinero dentro de un coche junto a Benavent, se ha preguntado: "¿Cómo puede ser que una grabación sin constatar se lance sin saber si soy yo? ¡Si no soy yo!", ante lo que ha insistido: "Que te grabe una persona es complicado, pero que te grabe uno que es tu amigo...".