La Generalitat Valenciana ya ha formalizado la demanda ante el contencioso-administrativo del Tribunal Supremo contra la sanción que la Unión Europea interpuso a la C. Valenciana de 18,9 millones por ocultación del déficit de los años del Partido Popular al frente del Consell.
Según informaron fuentes de la cartera de Hacienda, el conseller Vicent Soler esta dispuesto a dar la batalla y llegar donde haga falta al considerar que «la mala gestión de los populares obliga a los valencianos a pagar una sanción» que el Gobierno de España ha repercutido a la Generalitat con intereses. En concreto, más de 100.000 euros, lo que eleva la sanción a más de 19 millones de euros.
Por otro lado, la Generalitat informó ayer que ha reducido su déficit en términos de contabilidad nacional „que es el criterio que se sigue para la notificación a la Unión Europea„ en un 95 % hasta el 30 de abril pasado, en relación al mismo periodo de 2015.
Las mismas fuentes indicaron que este porcentaje de reducción se ha establecido con datos homogéneos para ambos ejercicios y ajustando el efecto de la liquidación de 2014 que se cobrará en julio con un reparto equitativo a lo largo de los siete primeros meses.
La comparación, que permite ofrecer una imagen fiel de la situación al incluir el volumen de recursos de los que va a disponer la Generalitat este año, revela que hasta abril pasado el desfase real entre ingresos y gastos se situaría en -33,5 millones, lo que representa el -0,03% del PIB valenciano, frente a los -683,8 % y el -0,67 % en términos de PIB registrados en el mismo periodo de 2015. El descenso es de 650 millones, una minoración del 95,1 % respecto al ejercicio pasado, apuntaron las fuentes. El límite de déficit para todo el ejercicio es del 0,7 % del PIB.
El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, afirmó que el Consell «está haciendo una ardua labor de limpieza contable de la Generalitat y de erradicación de las artimañas financieras del pasado que está empezando a dar sus frutos».
Con todo, el titular de Hacienda advirtió de que la infrafinanciación de la Generalitat es una realidad «gravísima», de forma que la Generalitat «sigue necesitando los 1.300 millones que se reivindican de mejora de la financiación autonómica».
Según datos ofrecidos ayer por el Ministerio de Hacienda, y sin tener en cuenta los anticipos de la liquidación entregados hasta abril por el Gobierno central, el déficit del Consell se situaría en 745 millones, el 0,71% del PIB, lo que supone una reducción del 30,7 % respecto al desfase de 1.075 millones y el -1,06 % registrado en abril de 2015. Según la Generalitat, esta comparación es parcial, ya que no incluye la liquidación que se cobrará en julio.
