La comisión de investigación del accidente del metro acaba de aprobar el dictamen que concluye que el accidente de metro en el que murieron 43 personas fue «previsible e inevitable» y tuvo 13 responsables por acción u omisión en el siniestro y en la gestión posterior. Una conclusión que ha salido adelante con los votos a favor de PSPV, Compromís, Ciudadanos y Podemos y que ha contado con el voto en contra en solitario del grupo popular, que ha emitido un voto particular.

Entre los 13 responsables políticos se encuentran el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, el exvicepresidente Víctor Campos, el exconseller Juan Cotino y el exportavoz del PP en las Corts, Serafín Castellano, además de exdirectivos de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), con Marisa Gracia al frente o de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) por el veto a la Asociación de víctimas del metro 3 de julio (Avm3j) durante años.

En un debate corto pero muy intenso, los cuatro partidos que han apoyado el dictamen coinciden en destacar la reparación moral a las víctimas del metro y han lamentado el enrocamiento de los populares en «las mismas conclusiones de la comisión de 2006». Fabiola Meco (Podemos) ha destacado que «hoy concluye una etapa en la que las instituciones han vuelto a estar del lado de la ciudadanía y han vuelto a dar la cara. Ha sido una comisión de investigación para averiguar la verdad y no en función de unos intereses partidistas. La verdad que causó 43 muertos y 47 heridos. Hoy hemos sabido que se pudo invertir en seguridad, que se manipuló la comisión y la información en los medios públicos, que el PP no ha querido ver y quedarse pegado a la verdad que ellos marcaron y que se ha demostrado inexistente».

Alexis Marí (Ciudadanos) ha defendido que «por fin 43 muertos más 47 heridos ya es igual a 13 responsables, que tuvo que ver con la nefasta gestión de la Generalitat y de FGV» al tiempo que denunciaba la «prepotencia del PP que ha podido pedir perdón durante todos estos años pero no lo ha querido hacer, tras una gestión muy infame que ha persistido en el dolor y que ha apartado a las víctimas porque molestaban. Las víctimas no pedían cariño sino reparación».

Isaura Navarro (Compromís) ha asegurado que «el Parlamento ha recuperado la dignidad. Las víctimas no van a volver, pero ahora sabemos quiénes fueron los responsables de ese accidente: unos profesionales de la mentira y de la manipulación. El accidente era evitable si se hubiera invertido en seguridad, en lugar de invertir en grandes eventos y en visitas del Papa».

Ana Barceló (PSPV) destacó que la comisión de investigación ha permitido descubrir «el velo de falsedades, mentiras e hipocresía que rodeó al accidente. La verdad era incómoda como lo eran las víctimas del metro y el gobierno no estuvo a la altura de sus responsabilidades. En lugar de gestionar con humildad, sensibilidad y eficacia pusieron en marcha un operativo para pasar página».

Alfredo Castelló (PP) justifica su vota particular y su negativa a aprobar el dictamen del resto de partidos políticos en que «las conclusiones son un error sin sustento ni argumento, porque las responsabilidades políticas que se determinan no están justificadas y se acusa a técnicos de FGV y RTVV sin pruebas ni justificación». El PP sigue insistiendo en que la Línea 1 «era segura, porque no se había producido ningún accidente en la curva del siniestro desde 1988 hasta 2006», aunque sí que han asumido «errores en la gestión política» pese a que «somos incapaces de determinar qué se ha hecho mal», sólo admiten que la contratación de la consultora H&M Sanchis por parte de FGV para la anterior comisión «ni en lo ético ni en lo estético nos parece normal».

La presidenta de la Avm3j, Rosa Garrote, que estuvo acompañada por una nutrida representación de familias de las víctimas, se mostró «satisfecha» por la aprobación del dictamen y destacó que haya sido impulsado «por cuatro partidos, porque le quita el interés político y demuestra que ha sido un trabajo de una investigación con el único interés de buscar la verdad». Garrote destaca que el dictamen recoja «lo que hemos estado denunciado durante todos estos años: que el accidente era evitable y que se produjo por una mala planificación del riesgo ferroviario por parte de FGV y que la responsabilidad era de la empresa y no del conductor». La Avm3j también alaba que se hayan identificado «trece responsables». Sobre el voto en contra del PP, Garrote ha explicado que «era lo que se esperaba. Es muy triste y lamentable que el dictamen que hayan presentado hoy coincida palabra por palabra con su tesis defendida en 2006. Y eso lo único que quiere decir es que no han investigado, no han escuchado y se han dedicado a mantener la versión que convenía al expresidente Camps y al gobierno valenciano de 2006».