Una vez se articule el periodo transitorio para dar una solución a los estudiantes de la privada ya matriculados y se organice el nuevo sistema de prácticas que excluye del circuito público a las privadas, la Conselleria de Educación, junto a la de Sanidad, debe acometer un segundo reto: adecuar la oferta de estudios en Ciencias de la Salud a la capacidad «real» de plazas de prácticas . En ese nuevo escenario son las universidades privadas las que más tienen que perder si no aumenta el número de hospitales privados con autorización para ser universitarios. Manises lo solicitó y recibió una negativa y el de Alzira, en principio, saldrá del circuito privado en dos años, lo que empeorará aún más la

situación. v. s. valencia