La Conselleria de Igualdad ha decidido desbloquear las Ayudas al Cuidador No Profesional para que los familiares que deseen hacerse cargo de un familiar dependiente puedan recibir una compensación económica. Sin embargo, la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes (Aerte) y el sindicato UGT advierten: cada persona precisa de unas atenciones y no en todos los casos un familiar sin la formación necesaria puede hacerse cargo.

Por ello, le han remitido un escrito a la dirección general de Servicios Sociales que gestiona Sandra Casas para exigir que «se parta de un punto de vista específico y concreto de las necesidades de la persona que va a recibir el servicio pero nunca desde una valoración general» ya que «aunque existen determinadas circunstancias en las que el cuidador no profesional puede ser el recurso más adecuado no siempre lo es».

Es más, desde Aerte y UGT recuerdan que el impacto en el entorno del Cuidador No Profesional es «muy limitado, con jornadas interminables y una compensación muy pequeña en comparación con el esfuerzo». Y apuntan: «En muchos casos no cotizan a la Seguridad Social, de hecho en la Comunitat Valenciana solo cotizan 823 personas sobre 21.211 prestaciones concedidas lo que supone un 3,88% del total lo que se convierte casi en un trabajo precario, sin coberturas sociales, que se basa en la relación familiar para mantener esa situación y con una dificultad importante para valorar la cantidad del servicio debido a que se realiza en los domicilios y por los propios familiares».

La patronal defiende el Servicio de Ayuda a Domicilio -formado en un 85% por mujeres- que tienen «una supervisión técnica y una ejecución del servicio valorada por la familia».