Francesc Romeu, vicesecretario y portavoz del PSPV, publicó ayer en su blog personal un extenso escrito en el que pide al PSOE «altura de miras» para permitir un gobierno del Partido Popular tras los resultados de las pasadas elecciones del 26J. Tesis que choca con la defendida por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig y el secretario general del PSOE, que se han mostrado siempre contrarios a la «gran coalición». «Los socialistas tenemos la necesidad y la obligación de situarnos en el momento político e histórico, nacional, europeo e internacional y actuar, en consecuencia, a la altura del momento y de las exigencias de la sociedad española...» defiende en el texto, titulado «PSOE a la altura de las circunstancias». «Creo que el PSOE no puede seguir dando la imagen de que el partido lo gobiernan los barones con tacticismos personalistas del momento de cada baronía» prosigue.
Contexto internacional
El portavoz socialista también fundamenta sus tesis en el inestable contexto internacional -«brexit, terrorismo internacional, golpe de estado frustrado en Turquía»- y expone que «Rajoy y el PP no son una garantía de futuro, pero han ganado las elecciones. Y a nosotros se nos espera. Ni sorpaso, ni Pasoc... yo creo que el PSOE debe facilitar la constitución del gobierno de quien, a nuestro pesar, ha ganado las elecciones». El representante del PSPV también vaticina un posible escenario sobre unas terceros comicios: «Todos tenemos en el subconsciente que sólo hará que aumentar el margen de apoyo popular al PP», defiende.
A su vez, Romeu cree que el PSOE debe poner «condiciones y condicionantes» en el acuerdo, aludiendo al programa electoral de los últimos comicios y el acuerdo suscrito con Ciudadanos, «ratificado mayoritariamente por las bases del partido»: «Pactar no es anularse ni regalar nada». Y descarta cualquier otra opción: «Frente a 8 millones de electores del PP y más de 50 diputados de diferencia respecto al PSOE, un gobierno de 18 partidos liderado por aquellos que nos querían eliminar, no tiene sentido», defiende el vicesecretario. Otro de los argumentos barajados por Romeu „que recuerda a Felipe González, Calvo Sotelo o Zapatero„ podría considerarse un toque de atención a Pedro Sánchez: «Nos toca no reconstruir al PSOE (con 5,4 millones de votos no estamos destruidos) sino definirlo y fortalecerlo con un discurso fuerte y homogéneo para toda España. Estamos necesitados de liderazgo fuerte, posiciones claras y, sobre todo, de volver a ser la ser la referencia líder de las y los progresistas españoles, de trabajadores, estudiantes, autónomos, creativos...», apunta. «Hagamos política de la que espera la sociedad y preparemos el partido para que la gente vuelva a sentir orgullo», apostilla Romeu.
