La decisión del líder valenciano de Podemos, Antonio Montiel, de retirar la confianza a la secretaria de Organización, Extensión y Círculos, Sandra Mínguez, ha provocado un importante malestar entre la militancia. Una carta en favor de la también diputada autonómica lanzada ayer en la mayor plataforma en internet de peticiones de apoyo Change.org, superó el centenar y medio de firmas en pocas horas.

Los signatarios apoyan el trabajo que ha realizado Mínguez en el año y medio en que ha permanecido al frente del área de organización de Podemos pese a la escasez de recursos, la califican de honesta y comprometida y aseguran que no merece la destitución. En muchos de los mensajes no se entienden los motivos de su salida y se lanzan críticas al secretario general por las formas. Mínguez, una de las caras más conocidas del movimiento 15-M y que forma parte de Podemos desde sus inicios, cuando Pablo Iglesias sentó las bases de la formación, ha recibido más de 400 mensajes de apoyo en dos días.

En la dirección del partido y en el grupo parlamentario, el recambio decretado por Montiel también ha causado sorpresa y extrañeza, aunque se admite que es una decisión potestativa del secretario general que amparan los estatutos de la formación.

Mínguez y Montiel hablaron ayer y el grupo parlamentario se reunirá mañana. El secretario general le expuso de nuevo los motivos por los que le retira su confianza. Montiel busca un reajuste de tareas para impulsar el partido y pide más trabajo en el territorio y mimar a los círculos, unas razones que la diputada no comparte ya que considera que con los medios que tenía a su alcance ha hecho un buen trabajo en los círculos y cuenta con el apoyo de los consejos ciudadanos. Además, Mínguez sigue dolida por las formas, ya que conoció su destitución por una mensaje de móvil.

Fuentes cercanas a Montiel señalaron ayer que el también portavoz en las Corts está afectado por lo ocurrido ya que fue un error suyo con el móvil lo que precipitó la crisis interna.

Así se gestó la crisis

Montiel tenía preparada el viernes una carta que iba a enviar por mensajería de móvil al secretario de Organización estatal, Pablo Echenique, en la que le anunciaba cambios en el comité de coordinación, la ejecutiva del partido, entre ellos el de Sandra Mínguez, que abandona la secretaría de organización, pero pasaría a ocupar otra área, según los planes de Montiel que tenía en mente varios movimientos más, entre ellos en el área de Finanzas, dentro de una reestructuración de la ejecutiva para dar un nuevo impulso a la formación de los círculos, una vez se da por acabado el período electoral. Sin embargo, el escrito acabó por error en un mensaje a los móviles de los 35 miembros del consejo ciudadano, de forma que Mínguez conoció las intenciones del secretario general sin que éste se lo hubiera comunicado.

Con trasfondo político

Pero más allá de las formas, por las que Montiel se ha disculpado ante Mínguez, en la crisis hay un trasfondo más político y tiene que ver con la hoja de ruta y los tiempos diseñados por el dirigente de Podemos para que su partido se integre en el Consell de Puig y Oltra. Un sector del partido, en el que se alinea Mínguez, cree que es una decisión demasiado trascendente para tomarla con rapidez y reclaman un debate más profundo y pausado que llegue a toda la militancia antes de abordar una consulta e incluso señalan que es necesario definir con claridad el modelo de partido hacia el que se quiere caminar y reprochan a Montiel cierta prisa para que Podemos entre cuanto antes en el Consell.

Fuentes del grupo parlamentario creen que la entrada en el Consell es una oportunidad única que no se puede desaprovechar porque será difícil que se repita. Pero, la discrepancia está en los tiempos ya que en la dirección de Podemos hay quien piensa que Montiel va demasiado rápido y que ya tiene tomada la decisión de dar el salto.