La Generalitat ha hecho oficial que pagará a final de este mes a los empleados públicos la mitad de la paga extraordinaria de 2012 suprimida en su momento. La medida es una reivindicación reiterada de los sindicatos de la Función Pública que el Consell se comprometió a acometer. Sin embargo, los problemas con el Ministerio de Hacienda sobre la financiación de la Comunitat Valenciana han retrasado la transferencia de los fondos necesarios para el pago. Finalmente, se podrá realizar en la nómina de este mes de julio.
La Conselleria de Hacienda estimó en su momento que el coste de asumir el pago de la parte que faltaba de la paga retenida ascendía a 150 millones de euros.
El abono, según la resolución oficial de la dirección general de Función Pública, se realizara «por una sola vez», mediante «una retribución de carácter extraordinario cuyo importe será el equivalente a las cantidades aún no recuperadas de los importes efectivamente dejados de percibir como consecuencia de la supresión de la paga extraordinaria« correspondiente a diciembre de 2012.
El documento precisa que el pago «se hará efectivo mediante la inclusión del importe en la nómina que se abone en el mes de julio de 2016».
