Uno de cada tres euros que gasta la Generalitat acaba en manos de los bancos. Hacer frente a la deuda supone prácticamente un tercio del presupuesto de la Generalitat. En 2015, los créditos presupuestarios que el Consell reservó para financiar las obligaciones del Ejecutivo autonómico ascendían inicialmente a 5.003 millones de euros, lo que lleva camino de convertir al servicio de la deuda en la primera conselleria de la Generalitat. Si sigue la inercia no tardará en conseguirlo. Finalmente las obligaciones reconocidas del servicio de la deuda en 2015 se quedaron en 4.622 millones, pero la tendencia no varía. El servicio de la deuda se ha consolidado ya como segunda conselleria, pero está muy cerca de la de Sanidad, el departamento con más gasto de la Generalitat con 5.492 millones de euros. La Conselleria de Educación, Cultura y Deporte cuenta con un presupuesto de 4.098 millones.

Mientras, la cuenta general del Consell del ejercicio 2015, conocida ayer, recoge un resultado económico-patrimonial negativo de 4.543 millones de euros en el último ejercicio completo, además de un saldo presupuestario positivo de 643 millones.

En prácticamente todas las auditorías realizadas a las empresas públicas se señala que no existe una relación oficial de puestos de trabajo, por lo que los auditores urgen a la Generalitat a publicarla. Así, el nuevo gobierno, que lleva un año en ejercicio, todavía no dispone de una relación de puestos de trabajo de todos sus trabajadores y desconoce la labor que realizan muchos de los 6.279 empleados en nómina, según se deduce del documento publicado.

Deuda del sector público

El entramado de firmas públicas de la Generalitat mantiene una deuda de 4.843 millones de euros, de los que 1.320 son con el propio Consell. La reordenación del sector público se ha convertido en una de las prioridades que el Consell, aunque el camino no será fácil. Para el Consell, el recorte de entidades no es la prioridad sino la eficiencia de los entes.