«Las aseguradoras acabamos pagando por accidentes que no nos tocan, y eso debe cambiar», reclama José Antonio Blanco, responsable de Gesbous Serveis Taurins, S.L. y vicepresidente de la federación de peñas de «bous al carrer». Se refiere a posibles asistencias médicas por peleas o por caídas fuera del recinto. Pero también a personas en estado de embriaguez o a menores, que están incumpliendo la legalidad y, a su juicio, no deberían estar sujetos a la protección de un seguro.

El precio de las atenciones sanitarias que soportan los seguros son variables. Si se atiende en la ambulancia, no pasa a mayores. «Pero entrar a un hospital, aunque sea sólo por una tirita, ya cuesta una media de 148 euros. Un día ingresado en la UCI cuesta unos 2.000 euros. Por una cornada, la intervención y la estancia no bajan de los 6.000 o 7.000 euros», resume José Antonio Blanco.

Cuenta que han conseguido que una factura hospitalaria de 6.000 euros por la atención a un adulto que sufrió la cogida de un astado sea costeada por el afectado, que estaba ebrio cuando sufrió el percance como demuestra el informe del hospital. «Es bueno que se sepa para que la gente vaya mentalizándose», dice. p. c. valencia