Un hombre de 63 años, vecino de Massamagrell, falleció ayer en la localidad palantina de Viver al caerle encima una rama de un ejemplar de chopo, de más de 90 años de antigüedad y grandes dimensiones, mientras llenaba agua en la fuente de Mosén Villar.

El hombre se encontraba en ese momento con su mujer, «que tan solo registró varios rasguños y heridas leves en el brazo», según explicó a Levante-EMV el alcalde de la localidad, Vicente Martín, quien se mostraba muy afectado por el suceso.

Según confirmaron testigos presenciales, al parecer los hechos ocurrieron alrededor de las diez de la mañana cuando este vecino de Valencia, asiduo a llenar agua en esta fuente viverense a la que acuden multitud de personas a llenar garrafas, se encontraba llenando varias botellas. Fue entonces, informó el alcalde, «cuando parece que una rama del chopo ubicado en el lateral de la fuente cayó de repente, golpeándole en la espalda y al tumbarlo contra el suelo, se habría pegado un golpe en la cabeza contra el hormigón de la acera y habría fallecido en el acto».

Las dimensiones de la rama, informaba Martín, «serían de alrededor de 4 metros de largo y más de 300 kilos de peso, por lo que al caerle de golpe y totalmente encima fue mortal».

Al darse cuenta de lo sucedido, la mujer pidió rápidamente auxilio, lo que hizo que varios vecinos residentes en la zona salieran a ver qué pasaba. Al ver la situación, los vecinos llamaron a la Guardia Civil que, rápidamente, desplegó el dispositivo de seguridad.

En pocos minutos, la ambulancia y la SAMU, que tan solo pudo confirmar el fallecimiento, así como la Guardia Civil y la policía local se personaron en este transitado parque de Viver para acordonar la zona hasta que la policía judicial y el forense hicieron acto de presencia para proceder al levantamiento del cadáver y trasladarlo al anatómico forense.

Tal como narraba una de las vecinas residente en la casa aledaña al parque, «sobre las diez, he oído un ruido pero no se identificaba con la rotura de la rama de un árbol. Ha sido como algo raro y luego he oído pedir auxilio. Al principio he pensado que había sido un accidente, pero hemos salido varios vecinos y ya hemos visto que el señor estaba al lado de la fuente en el suelo y que una de las vecinas, que parece que era enfermera, le intentaba buscar el pulso sin éxito». Rápidamente, continuaba explicando, «ha venido la ambulancia y la guardia civil, pero se ve que el señor ya había fallecido».