El propietario de unos terrenos en Olocau, afectados por la construcción de un vertedero que gestiona Girsa (Gestión integral de resíduos sólidos SA) ha denunciado a la empresa pública que depende de la Diputación de Valencia por no pagar impuestos. El denunciante, Peregrín Mañez, presentó en el Registro General de la Agencia Tributaria de Llíria el pasado 11 de agosto un escrito en el que denuncia los impagos al fisco. Mañez litiga desde el año 1994 con Girsa a quien responsabiliza de «usurpar parte de un terreno de mi propiedad en 1994» para constituir una central de residuos que durante años ha sido objeto de polémica por las emanaciones de gases tóxicos y de lixiviados que han perjudicado a la población y a su entorno natural.

En la denuncia ante la Agencia Tributaria, Mañez adjunta «información sensible» en la que se determina que el vertedero podría haber almacenado residuos de diferentes empresas «cobrando por ello y sin tributar estos rendimientos» con el «agravante», según Máñez, de que el vertedero ha sido explotado por una empresa pública. La documentación „a la que ha tenido acceso Levante-EMV„ acredita la fecha, la hora y los nombres de las empresas que han depositado las «pesadas» en el vertedero, es decir, el volumen de los residuos de escombros, específicos e inertes.

La información recopilada y presentada a la Agencia Tributaria apunta que se realizaron «servicios de almacenamiento» de residuos en el vertedero de Olocau entre 1994 y 2012 «de forma continuada». La empresas debían pagar a Girsa por cada residuo depositado y Mañez denuncia que esos pagos «no se tributaban», por lo que el denunciante entiende que «se ha defraudado al erario público» al realizar esta actividad sin formalizar. Por eso, en la denuncia se solicita la investigación pertinente para «la averiguación de los hechos denunciados». La información «sensible» que recopiló el denunciante detalla la fecha y la hora y la cantidad de residuos, diferenciándolos en específicos, escombros e inertes, que cada empresa depositó, supuestamente, en el vertedero, anotando también la matrícula identificatoria y el origen de cada depósito, señalando también los municipios.

El detalle de las horas a las que las empresas dejaron sus depósitos establece diferencias de entre 2 y 20 minutos entre cada depósito. El cinco de marzo de 2002, entre las 08.05 horas y las 15.37, se registraron 137 entradas de depósitos. Es decir, 137 camiones que, supuestamente, entrarían en el vertedero para dejar los residuos. Hacienda debería cotejar la información que le ha hecho llegar el demandante con la que le ha entregado la empresa pública dependiente de la Diputación de Valencia para determinar si efectivamente ha habido algún tipo de irregularidad fiscal.

El vertedero de Olocau ha sido una fuente constante de conflictos y polémica por los problemas ambientales de emanación de gases tóxicos que ha sido objeto de investigación de delitos ambientales.