Cuando la Fórmula 1 automovilística empezaba vivía sus años de auge, el Consell del PP se lanzó a la promoción de otra carrera, ésta a menos velocidad, la Global Champions Tour. Un torneo a caballo entre lo deportivo y el papel cuché que galopó en los tiempos de Francisco Camps, pero que finalmente tuvo un paso fugaz por la Valencia de los grandes eventos hasta que en 2012 Alberto Fabra decidió soltar las riendas.

Para la promoción de aquella competición también se construyó una maqueta, en este caso un caballo de madera en tres dimensiones y a escala real. Costó 19.641 euros, según la factura a la que ha tenido acceso Levante-EMV. Sin embargo, su paradero resulta a día de hoy una incógnita, igual que ha ocurrido con la réplica del circuito urbano de la Fórmula 1 o los dos escalextric, uno tamaño grande y otro mediano, que se construyeron para difundir el evento automovilístico, como informó este diario.

Por lo que se conoce, la maqueta en tres dimensiones del caballo se expuso en Fitur, igual que la de la Fórmula 1, pero no hay constancia de su paradero en las instalaciones de la Generalitat. Por la réplica ecuestre, la Sociedad para la Imagen Estratégica y Promocional de la Comunitat Valenciana, la firma pública encargada de la difusión de los grandes eventos, pagó los 19.641 euros en un pagaré a 60 días. La factura incluía conceptos como el estudio de planimetría, el desarrollo en Autocad de las piezas, la aplicación de un programa para mecanizado de fresadora, una maqueta prototipo en PVC para su visualización y el barnizado y colocación de soportes de madera y metacrilato. También se incluye el traslado a Madrid, el montaje y el desmontaje.

Para la aprobación del gasto, la entonces directora de la sociedad, Arantxa Vallés, y la vicepresidenta de la empresa pública, Cristina Morató, firmaron un informe el 18 de enero de 2010. En él se recoge que la maqueta del caballo se expondrá en Fitur «como actividad dinamizadora».

La primera edición de la Global Champions Tour se había celebrado un año antes. El 10 de mayo de 2009 aparecieron por Valencia a lomos de sus monturas las amazonas Athina Onassis, Carlota Casiraghi o la hija de Amancio Ortega, Marta Ortega. Pero con la llegada de la crisis, el pago se complicó. Finalmente se celebraron tres ediciones, que resultaron muy caras para las arcas autonómicas a juzgar por el escaso impacto.

2,2 millones por las tres carreras

Las tres pruebas celebradas en la Ciutat de les Arts costaron en concepto de canon 2,26 millones más la cobertura televisiva de un evento que, al menos en Valencia, no generó mucho interés y en el mejor de los casos congregó a 7.000 personas ante las pantallas de RTVV. En 2012 se celebró en Oliva con gestión ya enteramente privada. Ese año el popular jinete Cayetano Martínez de Irujo denunció que la Generalitat adeudaba a Oxer Sports, la promotora del evento, unos 600.000 euros. El jinete anunció que no competiría en la C. Valenciana hasta que se saldara la deuda.