El proceso de renovación de los miembros del Consell Jurídic Consultiu (CJC), el organismo estatutario encargado de velar por la legalidad de la normativa de la Generalitat, podría llevar, por primera vez en su historia, a una mujer a la presidencia. Aunque los partidos políticos todavía no se han sentado para hablar de nombres, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a quien le corresponde proponer al presidente de entre los seis miembros que conforman la institución, ya tiene una candidata en la cabeza: la constitucionalista Margarita Soler y miembro del actual del Consell Jurídic. Fuentes de Presidencia consultadas por este diario, indican que Soler reúne el perfil idóneo para dirigir esta institución, tanto por su formación y experiencia académica, y porque, además, conoce la casa.

Aunque Soler fue designada en su momento para el CJC a instancias del PSPV, no es una persona de partido ni forma parte del círculo de cofianza del jefe del Consell. Entró en el organismo a propuesta de Puig, porque el entonces líder de la oposición valoró su currículum. Pese a ser la candidata del presidente, las fuentes consultadas precisaron que también podrían valorarse alternativas para sustituir a Vicente Garrido, quien, como el resto de miembros, está ya en funciones.

Aunque Soler es quien tiene más números, podría haber otras candidatas para el puesto. Y es que el factor género será clave en estas negociaciones. Según ha sabido este diario, el presidente ha tomado nota de las quejas que al inicio de legislatura surgieron del movimiento feminista y está dispuesto a romper con la exclusión histórica del sexo femenino al frente de los organismos estatuarios, donde el dominio masculino es absoluto. El bipartito, quien puso las políticas de género como un eje principal del acuerdo del Botànic, arrancó la legislatura con mal pie con el nombramiento de una Mesa de las Corts exclusivamente formada por hombres. Aunque rectificó a medias, todos los cargos institucionales de primera línea (presidencia de la Generalitat, Corts, diputaciones, Federación de Municipios, Delegación de Gobierno, etc) siguen copados por hombres, tanto los heredados de la etapa popular, como los nuevos.

La Sindicatura de Comptes, por ejemplo, se renovó hace poco y al frente se situó a Vicent Cucarella.

Conservar el prestigio

Con el CJC en funciones desde el pasado jueves, los grupos parlamentarios tienen previsto iniciar los contactos la semana próxima. La negociación podría coincidir con la de la renovación del consejo rector de RTVV, si bien, en principio, no parece que la renovación del Jurídic genere tantos problemas como la tele, ni en cuanto a nombres ni en cuanto a reparto. Existe un consenso generalizado de que para preservar el prestigio del organismo es necesario nombrar un consejo donde prime el perfil profesional al político, algo que ha logrado mantenerse en la instiución durante los sucesivos mandatos del PP y a pesar de sus mayorías absolutas.

Presidencia cuenta con consensuar con Compromís, su socio de Gobierno, los tres nombres que designa directamente el Ejecutivo, mientras que los otros tres, elegidos por las Corts con mayoría de tres quintos, podrían repartirse entre Podemos, Ciudadanos y PP. Los populares podrían seguir respaldando la continuidad de Enrique Fliquete, quien no ha expirado el máximo de mandatos.

En espera de que se celebre el debate sobre el Estado de la Comunitat, la renovación podría concretarse este mismo mes. La semana próxima, Vicente Garrido se verá con Puig para entregarle la memoria de 2015. Será seguramente el último acto como presidentetras 13 años al frente del ente.