El domingo 4 de septiembre de 2016 será recordado de manera funesta en los anales de la historia de la Comunitat Valenciana. Ese día se dieron las condiciones perfectas para que se produjera un gran incendio, y la tragedia se consumó en la Marina Alta, entre Xàbia y Benitatxell.

Las altas temperaturas, el bajo porcentaje de humedad relativa y las rachas de viento de poniente se combinaron de manera perfecta para que gran parte de la superficie boscosa de la Granadella se convirtiera en cenizas. Hasta el punto de afectar a algunas viviendas. Solo faltaba la «cerilla» que encendiera la primera chispa —al parecer, fueron cuatro—, y según apuntan las primeras investigaciones alguien la prendió de manera intencionada.

Es más, algunas voces autorizadas, como la del president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, apuntaban ayer a que el presunto pirómano se aprovechó de estas circunstancias meterológicas para provocar el máximo daño posible.

Durante el transcurso del pasado domingo se dieron las condiciones que los expertos denominan como «la barrera de los 30». Es decir, había más de 30 grados de temperatura, una humedad relativa menor al 30 % y rachas de viento superiores a los 30 grados. Esta situación facilita la propagación de un incendio y dificulta las tareas de los medios de extinción.

En concreto, Xàbia alcanzó el domingo una temperatura máxima de 35,9 grados, que ayer incluso fue superada hasta llegar a los 38,3. Además, la humedad se situó en unas cifras cercanas al 20 %, mientras que algunas rachas de viento alcanzaron los 53 km/h. A todo esto habría que añadir que en Xàbia se registró en la madrugada de ayer lunes la temperatura mínima más alta de toda la Comunitat Valenciana, con 26 grados.

Uno de los pocos aspectos positivos que favoreció la lucha contra el incendio fue que ayer la fuerza del viento remitió y que las rachas más fuertes llegaron tan solo a los 31 km/h.

De hecho, otra variante meterológica favoreció el fuego justo en el momento en el que el presunto pirómano prendió la mecha. Durante la tarde del domingo, el giro de la brisa a poniente en el litoral sur de Valencia y norte de Alicante provocó que estas áreas registraran sus puntos de mayor calor del día precisamente en ese momento. Es decir, marcaron sus temperaturas máximas a última hora de la tarde.

Además, el pasado domingo fue el día de septiembre con la temperatura media de la C. Valenciana más alta desde al menos 1950, según señalaron desde Aemet. Los 28,2 grados de media que se alcanzaron superaban en 2 grados la siguiente marca, del 7 de septiembre de 1988. Asimismo, en esos mismos términos, fue el día más cálido del año.

En Xàtiva, 43 grados ayer

El calor no dio tregua ayer ni se prevé que lo haga hoy, lo cual no facilitará la labor de los medios de extinción. Xàtiva registró máximas de 43 grados, Novelda de 42, Llíria, Rojales, Pinoso y el Altet alcanzaron los 40, mientras que Turís, Segorbe y Utiel, por ejemplo, llegaron a los 39. Y para hoy, según informó la Aemet, las condiciones de estabilidad atmosférica y la insolación continuarán dando lugar a un episodio de altas temperaturas con máximas entre los 39 y los 41 grados, que se estima que durará previsiblemente hasta mañana miércoles.