Otras dieciséis tortugas boba han nacido en el nido custodiado en una zona protegida de la playa de El Saler, una vez que los expertos han exhumado los cincuenta huevos que quedaban por eclosionar tras el nacimiento de las veintiuna primeras crías hace varios días.

Las dieciséis nuevas crías se encontraban bajo tierra pero imposibilitadas para salir por la «barrera» creada por los huevos más cercanos a la superficie que estaban muertos o no fecundados, por lo que la exhumación ha sido una «decisión acertada» que ha permitido sacarlas a la arena.

La portavoz de la asociación medioambiental Xaloc responsable de la protección del nido, Sara Sánchez-Quiñones, explicó que se tomó la decisión de exhumar el nido porque se sabía desde hacía días que ya habían nacido y, sin embargo, no habían salido a la superficie más que 21 de los 71 huevos enterrados.

«Hemos sacado dieciséis y no había ninguna tortuguita muerta, por lo que han sobrevivido todas las que han proliferado», indicó Sánchez-Quiñones, quien señaló que del resto de huevos ninguno va a ser incubado artificialmente, porque «o estaban muertos o no fecundados». Con toda probabilidad la suelta será la próxima semana en la misma playa.