Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Educación

La C. Valenciana es la que más universitarios pierde por la subida de las tasas

La matrícula cae en 15.490 estudiantes entre el curso 2011-12 y el 2014-15 tras el incremento en un 34,7 % de los precios públicos

Los autores del Informe 2015 de la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD) sobre la contribución de las universidades españolas al desarrollo, presentado ayer en Madrid, alertan de una «década perdida» en la educación superior por los recortes y la reducción de la inversión de la que «no existen precedentes», principalmente en el periodo 2009-2014. Además, vinculan parte de la pérdida de 100.000 estudiantes de Grado al impacto del decreto Wert de 2012 que permitió a las autonomías disparar el precio de las tasas.

Las universidades públicas que más alumnado de Grado han perdido en cifras absolutas entre el curso 2011-12, donde se alcanzó un máximo histórico, y el 2014-15 son las de la C. Valenciana, con 15.490 alumnos menos según las estadísticas del Ministerio de Educación. Este descenso suma más que los registrados conjuntamente por Cataluña (-3.753) y Madrid (-8.290) y supera al de Andalucía (-15.131). Y eso que estos tres últimos sistemas universitarios públicos cuentan con más alumnos que el de la Comunitat, que el 2014-15 formaba a 115.916 estudiantes de Grado, 11,8 % menos que dos cursos antes.

En porcentaje, el retroceso de la matrícula en la universidad pública valenciana es el cuarto más alto de España. Sólo tres autonomías presentan un mayor descenso: La Rioja (21,4 %), Asturias (15,8 5), Extremadura (-15,3 %) y Galicia (-12,5 %). Todas ellas padecen un acelerado envejecimiento de la población, mientras que la Valenciana es una de las más jóvenes.

Esta tendencia de pérdida de alumnado de las universidades públicas valencianas continuó el pasado curso 2015-16, con 6.598 estudiantes menos, una caída del 5,7 % con respecto al ejercicio anterior.

Las universidades públicas valencianas, según el Informe CYD, presentan el cuarto promedio del precio del crédito universitario más alto de España, con 20,4 euros por crédito de primera matrícula. El coste de un curso completo de 60 créditos es de 1.224 euros. Los precios más caros son los de Cataluña (33,5 ?), Madrid (27,3 ?) y Castilla y León (23,3 ?), mientras que estudiar en Andalucía (12,6 ? por crédito) o en Galicia (11,9 ?) cuesta casi la mitad que en la Comunitat.

A esta situación se llega porque la Generalitat es la quinta Administración que más ha subido las tasas, un 34,7 % entre el curso 2015-16 y 2011-12. Un ascenso, ordenado por la Generalitat del PP y que el Consell del Botànic ha consolidado manteniéndolo durante el curso pasado y este que ahora arranca pese a que Compromís, PSPV y Podemos prometieron bajar las tasas durante la campaña electoral.

El XII Informe CYD 2015, que señala que, a pesar de la mejora de la situación de España en términos de crecimiento del PIB, ésta «no se ha visto reflejada en el comportamiento de indicadores claves de la actividad de las universidades y, singularmente, en las públicas».

La reducción de los fondos desde 2008 a 2014 asciende, según el coordinador del informe, Martí Parellada, a 1.900 millones de euros y advierte de que si esto no se hubiera producido, en 2014 las universidades habrían contado con 6.000 millones adicionales. Un recorte compensado con un aumento de los precios de matrícula, especialmente tras el decreto Wert, al que los autores atribuyen en parte la reducción del alumnado matriculado en las universidades públicas.

«Una década pérdida»

Desde el curso 2011-12 hasta el 2014-215, el número de alumnos ha caído en términos absolutos en 100.000. «La caída en este periodo de prácticamente un 7 % de la población en edad universitaria (18-21 años) y la subida de los precios explicarían en buena medida esta evolución», explican desde la Fundación CYD. «Para garantizar la igualdad de oportunidades„añaden„, deben potenciarse los mecanismos de apoyo a los estudiantes con menos recursos».

«Todavía faltan tres años para que concluya la década y aspiramos a no tener que decirlo (década perdida), pero la situación no acompaña porque la principal Administración de las universidades son las autonomías y no es previsible que en los presupuestos de 2017 haya cambios importantes», lamenta el vicepresidente de la Fundación CYD, Francesc Solé.

Compartir el artículo

stats