Escuelas Católicas de la Comunitat Valenciana (Escacv), patronal que agrupa a 300 colegios concertados diocesanos y de congregaciones religiosas que escolarizan a 167.000 alumnos, criticó ayer el reparto de programas de enseñanza compensatoria por parte de la Conselleria de Educación a los centros privados concertados para este curso 2016-17. Fuentes de esta entidad aseguran que el balance final de la adjudicación publicada ayer arroja un saldo negativo para los colegios de Escacv 169,5 horas menos de refuerzo.
Escacv reconoce en un comunicado que «algunos de sus colegios han visto incrementadas las horas de compensatoria que tenían con respecto al año pasado; pero en muchos otros casos ha habido un descenso injustificado». La organización lamenta en la nota el recorte de horas «en aquellos centros educativos que verdaderamente llevan a cabo una función social importantísima con niños desfavorecidos».
Jesuitas y Capuchinas
Entre los centros más afectados por la reducción de horas de compensación educativa, la patronal católica destaca el caso del colegio Sagrada Familia (Capuchinas) de Massamagrell, «que tendrá 70 horas menos que el año pasado». Las Escuelas Profesionales San José de Valencia (Jesuitas), añaden, «han perdido 30 horas»
La compensación educativa es la que permite que en aquellos centros en los que se acoge a alumnado inmigrante se les pueda dar una atención más personalizada. También facilita que los gabinetes psicopedagógicos de los colegios puedan contar con más profesionales para atender los problemas de aquellos alumnos que viven situaciones de conflicto en sus familias o en su entorno.
