La reunión de la Mesa sectorial entre la Conselleria de Educación y los sindicatos docentes sobre el borrador del decreto de plurilingüismo acabó ayer con declaraciones contradictorias entre el Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament (Stepv), fuerza respaldada por la mayoría absoluta del profesorado de la enseñanza pública, y el departamento del conseller Vicent Marzà.

El Stepv anunció en un comunicado tras la reunión que la conselleria «ha aceptado establecer un mecanismo para garantizar la progresión de los niveles, aunque no ha planteado un texto concreto». Minutos después, fuentes de Educación matizaron a preguntas de Levante-EMV el anuncio del sindicato en el que milita el conseller: «En la Mesa hemos explicitado que garantizaremos la progresión de niveles a todos los centros que lo deseen tal como se señala en la propuesta de decreto». «Garantizar la progresión no tiene que ver con ninguna obligación ni imposición», subrayaron.

La obligatoriedad de que los colegios de línea en castellano se cambien a la enseñanza en valenciano es el principal caballo de batalla que separa a Marzà del Stepv en la introducción del plurilingüismo. El conseller desde el primer momento ha insistido en que en la situación actual, en la que 7 de cada 10 alumnos estudian en castellano, no es realista ni pedagógico imponer el valenciano en las aulas.

El decreto fusiona las dos líneas actuales de enseñanza en castellano y en valenciano en un único Programa Plurilingüe Dinámico (PPD) que en Primaria se divide en una escala de seis niveles en la que se va progresando según se introduce más valenciano e inglés.

Así, los niveles Básico 1 y 2 son las actuales líneas en castellano. Al Intermedio 1 y 2, le sigue el Avanzado 1, que se equipar a la línea en valenciano, y culmina con el Avanzado 2, donde el castellano se reduce al 19,3 % mínimo exigido por la Ley Orgánica de Mejora de la Educación (Lomce) -Lengua castellana más una asignatura no lingüística„, y el resto de clases se dan en valenciano (49,3 %) y en inglés (31,4 %). Nada en el decreto obliga a los colegios con líneas en castellano a evolucionar hacia los niveles más avanzados.

El Stepv reclama que el mecanismo anunciado por conselleria «no puede dilatar en el tiempo la progresión de los niveles». Por ello propone que una vez se implante el PPD el próximo curso 2017-18 en el segundo ciclo de Educación Infantil (3-5 años), «al final de esta etapa, cada dos cursos -coincidiendo con los ciclos educativos- los centros deberían avanzar hacia el nivel siguiente».

El sindicato entiende que así «se evitará la creación de centros gueto en los que la lengua vehicular de la enseñanza, bien el castellano en los niveles básicos o el valenciano en los avanzados, sera un elemento de segregación». Educación se mantiene en el calendario de implantación a lo largo de siete cursos previsto en el borrador.