Un joven, exconcursante del programa de televisión «Mujeres y hombres y viceversa», ha sido acusado de un delito de maltrato animal después de que su perro tuviera que ser sacrificado tras abandonarlo en la protectora «en estado caquéctico, deshidratado y con signos evidentes de no haber ingerido alimento ni la atención necesaria durante semanas». El hecho, del que informó en exclusiva Levante-EMV, es por desgracia uno más de los muchos casos que a lo largo de este año están entrando en los juzgados valencianos por delitos contra animales domésticos.

El pasado mes de marzo el pequeño Chiqui, un perro de la raza Pinscher, murió ahogado por su propio dueño después de que éste le atara al cuello un bloque de hormigón y lo arrojara al río Vaca, en Benifairó de la Valldigna. El propietario decidió acabar con la vida del animal, que tenía una pata rota, porque no tenía intención de asumir el coste de la cirugía. La Fiscalía especializada en Medio Ambiente ha solicitado para él una pena de un año y medio de prisión por un delito de maltrato animal.

Asimismo, el Juzgado de Instrucción número cinco de Sueca mantiene una causa abierta contra un hombre por dejar a su perra Barbita encerrada en el maletero del coche, estacionado en Cullera, a unos 45 grados de temperatura, mientras se iba a pasar el día a Alicante. La Policía Local encontró al animal, entre vómitos y sus propias heces, convulsionando y en estado de deshidratación grave. En este caso el acusado se enfrenta a un año de cárcel, ya que «de no haber mediado la intervención policial el perro habría fallecido».

Un largo camino por recorrer

Aunque aseguran que aún queda «demasiado camino por recorrer» para acabar con el maltrato animal, sobre todo porque la ley sigue considerando a los animales como si fueran «cosas», la sociedad avanza en su convivencia con las mascotas y la Justicia, también. Hace años, las causas que pasaban por los juzgados de la Comunitat Valenciana en asuntos relacionados con el maltrato de animales eran entre pocas y ninguna. El año pasado, sin embargo, en los juzgados valencianos se tramitaron 42 causas de maltrato a animales domésticos, un 12,6% más que el año anterior según figura en la Memoria de 2016 de la Fiscalía General del Estado.

La mayoría de las denuncias de maltrato animal que llegan ante el juez son interpuestas o por el partido animalista Pacma o por las diversas protectoras de animales que trabajan en la Comunitat Valenciana. «Hay que tener en cuenta que para iniciar un proceso penal se precisa de abogado y procurador, lo que limita a los particulares a la hora de iniciar acciones judiciales de forma individual», aseguran desde la protectora Modepran, que se encarga en la actualidad del refugio de animales del Ayuntamiento de Valencia.

Desde el partido animalista Pacma apuntan, además, al factor del «miedo». «La gente puede ver a su vecino maltratando a su animal y tener ganas de denunciarlo, claro. Pero hay miedo a reacciones posteriores. Es difícil denunciar tanto a un conocido como a un desconocido así que la gente, por lo general, nos llama a nosotros o a las protectoras para denunciar casos de maltrato animal», explica la coordinadora de Pacma en Valencia, Raquel Aguilar. Las denuncias de particulares proliferan de tal forma que desde el partido animalista cuentan con un sistema de asesoramiento „que se denomina «Yo denuncio»„ para interponer las denuncias de manera automática, de forma que el usuario solo deba rellenar el formulario y presentarlo ante la Guardia Civil, en una comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, en la policía local o en el juzgado de guardia.

Y es que la legislación sanciona, por un lado, el maltrato animal por la vía administrativa „cada comunidad autonómica aplica y regula las sanciones que considera oportunas y que, en la caso de la Comunitat Valenciana oscilan entre los 30 y los 18.000 euros„ o por la vía penal que incluye, desde el mes de julio de 2015 una pena máxima de un año y medio de prisión.

Tanto el partido animalista como protectoras como Modepran exigen un endurecimiento de las sanciones, una reforma del código penal que «castigue de verdad el maltrato animal» y formación para todos aquellos que intervienen en el proceso porque «hay demasiado desconocimiento».

Por ello, la presidenta de la sección de Derecho Animal del Colegio de Abogados de Valencia (Icav), Amparo Requena, recalcó la importancia de la formación de abogados y juristas en este tema y quiso felicitar, además, a la Fiscalía de Medio Ambiente de Valencia porque «se está tomando muy en serio las causas sobre maltrato animal». En lo que llevamos de año la Fiscalía tiene abiertos 25 procedimientos por este tipo de delitos, trece de ellos listos para ser juzgados.