La Mesa por la Educación en Libertad -plataforma que integra a las patronales, sindicatos docentes y Ampas de la enseñanza concertada valenciana- está preparando un escrito para denunciar ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo «la posible supresión de los conciertos de Bachillerato y FP vulnerándose la libertad de elección de los padres de la educación para sus hijos en la Comunitat Valenciana», según ha anunciado el portavoz de la Mesa, Vicente Morro.
Morro justifica esta denuncia preventiva «ante los reiterados mensajes públicos que se lanzan desde la Generalitat y que apuntan a que se van a recortar los derechos de los alumnos valencianos».
La Mesa considera que esa Comisión es el órgano adecuado «para dar a conocer la queja al violarse los derechos como ciudadanos valencianos, españoles y europeos, por la Generalitat al anteponer el programa electoral de la coalición de gobierno a las libertades de sus ciudadanos». «Con la decisión de suprimir los conciertos de Bachillerato y FP se ponen en riesgo miles de plazas escolares y de puestos de trabajo, así como la viabilidad de centros educativos sin que exista ningún argumento más allá del cumplir una hoja de ruta política», recalca Morro.
«Es un derecho consolidado»
Asimismo, sostiene que los conciertos en Bachillerato y FP «no son una anomalía, como dijo el conseller (de Educación, Vicent Marzà), sino un sistema consolidado en la Comunitat, que cuenta con un respaldo legal y sobretodo con el respaldo que le dan los miles de alumnos que optan por la enseñanza concertada para realizar sus estudios antes de ir a la universidad». «Es un derecho consolidado que no debe ser recortado», añadió.
Los conciertos singulares de Bachillerato los introdujo el Consell del PP en el curso 2007-08, y 10 cursos después forman a 13.900 jóvenes. A estos hay que sumar los 15.000 estudiantes de la FP concertada. .
Por último, Morro apunta que este es el primer tema que se va a presentar ante Bruselas pero no se descarta ir canalizando otras quejas «para ver si un toque de atención de Europa hace avergonzarse» al jefe del Consell, Ximo Puig.
