Crónica de un despido anunciado. La consellera de Sanidad, Carmen Montón, consumó ayer el cese del gerente de Fisabio, Jacobo Martínez, cuatro meses después de que lo propusiera formalmente por primera vez tras el escándalo por la presunta ocultación intencionada de la contratación por parte de la entidad de una de las hijas de la entonces secretaria autonómica Dolores Salas, de Compromís.

Salas se retiró en su día tras la polémica pero la reunión del patronato que convocó Montón para pedir la cabeza del ahora exgerente nunca se celebró. Cuatro meses después y pasada la polémica, el máximo órgano de gestión de Fisabio se reunía ayer para completar aquella decisión de Sanidad. Martínez vuelve ahora a su puesto de coordinador del biobanco dentro de Fisabio y su puesto lo ocupará José Antonio Manrique, un médico histórico del PSPV que ha venido ocupando diversos cargos de responsabilidad en el área de Salud desde 1983 y que, hasta ayer, era director de la Escuela de Estudios para la Salud, EVES.

La destitución de Jacobo Martínez que ahora se ha hecho efectiva se esperaba para el pasado 5 de julio. Era el día en el que la consellera había convocado al patronato con la intención de pedir su cese. Martínez era el firmante de la documentación que meses atrás la fundación había enviado a las Corts y a la propia Conselleria de Sanidad sobre las contrataciones realizadas desdes el cambio de gobierno y en la que, entre 150 personas, solo faltaba el contrato de ocho meses del que había disfrutado la hija de la entonces secretaria autonómica de Sanidad, Dolores Salas, segunda de Montón pero designada por Compromís, socios de gobierno del PSPV.

La omisión disparó todas las alarmas entre las filas del grupo parlamentario del PP, peticionarios de la lista, pero también dentro de los despachos de la Conselleria de Sanidad. Jacobo Martínez también fue el firmante de un documento exculpatorio en el que se achacaba a un «error humano» y a la concatenación de situaciones imprevistas la omisión, precisamente, de esa línea de texto.

Las explicaciones, sin embargo, no fueron bien recibidas en Sanidad y Martínez quedó en el ojo del huracán, a la espera de una destitución que parecía anunciada tras la caída también de Salas.

El ya exgerente de Fisabio puso entonces su puesto a disposición de la consellera, recordando que su nombramiento había sido por tiempo limitado y su perfil era más técnico que político pero no fue aceptado.

Sexto gerente de Fisabio

Su sucesor, el licenciado en Medicina José Antonio Manrique será el sexto gerente que Fisabio tenga en siete años. Manrique ha sido concejal socialista en Paiporta en dos legislaturas diferentes y ha encadenado responsabilidades en Sanidad desde que ocupó la jefatura del Servicio de Ordenación Sanitaria de 1983 a1985. Desde entonces ha sido jefe del Servicio de Promoción de la Salud (1985-1986); Jefe del Servicio Territorial de Sanidad, director Territorial y jefe de Sección de Vigilancia Epidemiológica, entre otros cargos.