Tras conocerse el caso de la señora que tuvo que ser trasladada en la parte de atrás de una furgoneta de los bomberos echada sobre un somier, desde la Conselleria de Sanidad comenzaron a trabajar para buscar una solución a una realidad cada día más frecuente pero que no estaba contemplada en el pliego de condiciones en el que se adjudicó el servicio de traslado médico y urgente de toda la Comunitat Valenciana por cuatro años.

Conscientes de que el caso de Margalinda es uno de muchos (hay alrededor de 600.000 adultos con obesidad y obesidad mórbida en la Comunitat), la Administración valenciana ha decidido adquirir una camilla especial para traslado de pacientes con obesidad mórbida para dar servicio.

En principio, y según explicaron fuentes de la conselleria, se ha adquirido con cargo a las arcas públicas una camilla „y su correspondiente plataforma„ que pueden soportar hasta un peso de 300 kilos y que se han montado en una SAMU tradicional. La «unidad de transporte bariátrico», que empezará a dar servicio a partir de la semana que viene, estará radicada en Valencia pero podrá operar en toda la Comunitat Valenciana.

La consellera Carmen Montón quiere así dar respuesta a esta problemática aunque el recurso puede quedar sobrepasado en poco tiempo. La intención es incluir esta demanda entre las condiciones para sacar de nuevo a licitación el contrato de traslado médico y urgente de la Comunitat Valenciana que expira en 2017 y que en 2013 estuvo envuelto en polémica.