La asesora de alcaldía durante la etapa de Rita Barberá, Patricia Iserte, ratificó ayer ante el juez y el Fiscal Anticorrupción del «Caso Taula» la operativa del pitufeo presuntamente cometido por el PP de Valencia en la campaña electoral municipal de 2015 y las amenazas que recibió de la secretaria del grupo municipal popular, Mari Carmen García-Fuster, según explican a Levante-EMV fuentes conocedoras de su declaración. Iserte, que compareció a petición de las defensas de los ediles, asesores y exconcejales investigados en la pieza separada del «pitufeo» (blanqueo de dinero en pequeñas cantidades) ratificó a preguntas de los letrados sus anteriores declaraciones ante los agentes de la Guardia Civil, el juez y el Fiscal Anticorrupción que el asesor de la concejala Beatriz Simón le mostró «dos billetes de 500 euros» que, presuntamente, le habrían sido devueltos por García-Fuster tras realizar el ingreso de 1.000 euros. También compareció como testigo el representante de la empresa Trasgos, Antonio Puig, responsable de la campaña electoral municipal del PP de Valencia en 2011, quien confirmó haber negociado los contratos y detalles con el responsable de la campaña, Alfonso Grau. Puig aseguró desconocer que debía comunicar los gastos electorales al Tribunal de Cuentas. l. b. valencia
