El Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) cuestionó ayer las prioridades del fisco para aumentar la recaudación tributaria. El colectivo lamenta que el Ministerio de Hacienda no se haya dado la misma prisa en reclamar las cuentas bancarias de españoles radicadas en paraísos fiscales que en exigir la tributación de las pensiones de los emigrantes, que están asfixiando a más de 20.000 valencianos. En cualquier caso, Gestha apoya la regularización que está llevando a cabo Hacienda porque «en España se tributa por la renta mundial y los emigrantes tienen que declararlo. Es lo correcto».
Un portavoz de Gestha explicó que para no hacer más gravosa la situación Hacienda abrió una ventana de tiempo entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2015 en la que se hizo una «regularización blanda» ya que no se aplicaron recargos por los intereses ni se impusieron multas. «A las personas que ya lo habían pagado antes del 1 de enero se les devolvieron los recargos. Estas personas tuvieron la oportunidad de aprovecharse al máximo de las ventajas fiscales si regularizaron su situación en el periodo establecido», aseguró.
Sin embargo, el colectivo echa de menos una actuación más activa del Gobierno contra las grandes fortunas ocultas en paraísos fiscales. Hacienda comenzó a reclamar las tributaciones en el extranjero de los emigrantes en 2014 y hasta 2017 no va a contar con la información de las cuentas de los españoles en países como Luxemburgo y Liechtenstein. Otros países como Suiza no tendrán la obligación de comunicar a España las cuentas y los depósitos de los españoles hasta 2018. «Tampoco va a ser una información completa porque si el titular de una cuenta en Luxemburgo es una sociedad radicada en las Islas Caimán, el banco va a tener complicado saber quién es la persona física. Esa información de cuentas opacas no se va a obtener», señaló la misma fuente.
20.800 afectados
Con la campaña de las pensiones en el extranjero y tras enviar la comunicación a más de cien mil domicilios, la AET consiguió regularizar 20.800 pensiones en la Comunitat Valenciana y recaudar 42,8 millones de euros en más de 56.500 autoliquidaciones.
Los pensionistas retornados que sufren una discapacidad pueden solicitar la exención de retenciones en su declaración de la renta. Según explicaron fuentes de la Agencia Tributaria, «si el contribuyente no está inmerso en un procedimiento abierto por la AEAT, lo que debe hacer es acudir a la Seguridad Social y solicitar un certificado de discapacidad». En función del resultado, «esa pensión estará exenta o no». Por otro lado, «si ya está en un proceso abierto por la AEAT, debe trasladar a la Agencia Tributaria la circunstancia de la discapacidad y será Hacienda la que solicite de oficio un informe a la Seguridad Social, que es quien debe decidir al respecto».
