Descuentos de más de 6.000 euros, una flota de 3.300 coches en un espacio de 64.000 metros cuadrados dedicados a la oferta comercial y un pabellón dedicado a demostraciones de pilotaje, circuitos de karts y campeonatos de «Scalextric». Estas son algunas de las ofertas que se encontraron ayer los miles de visitantes que asistieron a la inauguración de la decimonovena edición de la Feria del Automóvil y del Vehículo de Ocasión, que se celebra hasta el próximo martes en Feria Valencia. Las oportunidades de compra durante los cinco días que dura el certamen -del 2 al 6 de diciembre- volvieron a ser el mejor reclamo posible de una cita donde se pueden estudiar y adquirir tanto vehículos nuevos como seminuevos, de ocasión, kilómetro cero, comerciales y ecológicos repartidos en cuatro pabellones.
Otros sectores del mundo del automóvil como asociaciones, seguros, financieras, industria auxiliar, complementos y empresas de seguridad vial también tienen su hueco estos días en el recinto ferial. En comparación con 2015, el certamen ha aumentado un 6% en lo que a superficie expositiva se refiere, y la oferta de automóviles ha ascendido un 10%. El número de escaparates ha crecido un 14%, de manera que se han alcanzado los 70 expositores directos. «El año pasado vivimos una edición de récord, con más de 2.300 coches vendidos», indicó Raúl Palacios, presidente del certamen.
«Hemos redoblado esfuerzos en seguir este camino», añadió, de manera que esta edición de la feria será «la mayor de su historia», incidía Palacios, visiblemente satisfecho por el éxito de esta nueva convocatoria.
«Pasar un día agradable»
Palacios señaló que, mientras el resto de ferias de este tipo están enfocadas a la exposición de vehículos, la que acoge estos días Feria Valencia pretende convertir esta clase de acontecimiento en un «evento familiar». Por lo tanto, «no se quiere limitar a ser un proceso comercial», sino que la intención es lograr una experiencia «que permita pasar un día agradable».
Para cumplir este objetivo, la Feria ha destinado íntegramente un pabellón de 10.000 metros cuadrados a demostraciones de pilotaje, circuitos de karts que algunos no pudieron resistirse a probar, castillos hinchables y juegos infantiles, actividades de seguridad vial, campeonatos de «Scalextric» y experiencias de conducción en vehículos de alta gama. Además, a lo largo del Distribuidor Central de Feria Valencia se desarrollan competiciones de coches «tuneados» y se ha habilitado una zona gastronómica en el que los «Food Truck» -camionetas de comida- sacian el hambre de los visitantes que hayan decidido tomarse un descanso.
El público acudió al evento para «mirar opciones», como manifestó Vicent Enguix. Gabriel Llop mostró su interés en «buscar un coche» y «ver precios», pero no notó mucha diferencia en comparación con «concesionarios». En cambio, Cristina Carbonell y Francisco Javier Usina -que ya habían asistido a otra edición- buscaban «un coche de ocasión» y se quedaron soprendidos con los camiones de comida. «Estaban bien», señalaron al unísono.
Lara Canet también se encontraba inmersa en esa búsqueda y observó «muchos vehículos de segunda mano», pero no tantos «coches nuevos». Aunque ya realizaron una compra el año pasado, Mamen y Enrique volvieron ayer para cambiar el segundo automóvil de su casa y tener «mejores» oportunidades de compra. Ante la necesidad de adquirir un vehículo de 7 plazas, David y Ana decidieron «buscar descuentos» en este evento. La Feria abrirá de 11.00 a 20.00 horas hasta el martes 6. El precio de la entrada es de 5 euros, aunque es gratuita para los menores de 16 años que vayan acompañados por sus padres.
