El sector crítico con el portavoz del grupo parlamentario, Alexis Marí, acudirá a las instancias superiores del partido tras confirmarse, ayer, que el nombre que la formación ha registrado como candidato a ocupar un puesto en el Consell Jurídic Consultiu (CJC) es el de José María Tomás y Tío, la propuesta del propio Marí.

Fuentes del grupo señalan que la decisión es una gota que colma el vaso, un «hasta aquí hemos llegado», en palabras de un diputado crítico, que no descarta dimisiones y cree que lo ocurrido tendrá consecuencias. Este sector dice que la votación legítima es la que eligió a otro representante, con seis votos a favor y ninguno en contra, pero Marí no le da validez y sí a la que realizó la dirección del grupo que decantó él mismo con el voto de calidad. Ahora, los críticos acusan al portavoz en las Corts de vulnerar los estatutos. Una redacción confusa aún complica más un pulso que llegará a Madrid.

Con todo, lo ocurrido es un punto de inflexión porque lejos de acercar a los dos sectores enfrentados en C's agranda la brecha. La queja llegará al comité ejecutivo y lo usual es que se inhiba en el área de relaciones instituciones.

De la votación del grupo se deduce que Marí tiene el apoyo de siete diputados, incluido él, frente a seis alineados con los críticos. Las diferencias se estrechan y el síndic controlar ya por la mínima el grupo por lo que el futuro, con un enfrentamiento cada vez más enconado, es un campo minado.