La convocatoria de oposiciones más larga de la historia, 500 plazas de catedráticos de Secundaria y de Escuela Oficial de Idiomas (EOI) convocadas el 22 diciembre de 2009 por el entonces conseller, Alejandro Font de Mora, sigue sin cerrarse casi siete años y tres consellers después. Aunque el nombramiento del grueso de los candidatos se hizo el pasado 1 de septiembre, aún quedan por resolver 45 plazas de Tecnología y Organización y Gestión Comercial.
Esta promoción interna despertó muchas expectativas ya que hacía casi 15 años que no se convocaban plazas a catedrático, por lo que concurrieron 4.400 candidatos. La conselleria del PP tardó un año en publicar la lista de admitidos, pues no lo hizo hasta el 22 de diciembre de 2010. A esto hay que sumar otros cuatro años más de retraso en aprobarla, pero cuatro meses después rectificó al excluir a los aspirantes que no tuvieran la titulación de doctor, licenciado, ingeniero o arquitecto, pese a que las bases de la convocatoria si que contemplaba la inclusión de las «titulaciones equivalentes a efectos de docencia» como ingenierías, arquitecturas técnicas y diplomaturas.
Esto afecto en mayor medida a Tecnología (25 plazas) y de Organización y Gestión Comercial (20 plazas), lo que desencadenó una serie de recursos de los afectados que paralizó toda la convocatoria. Finalmente, el pasado 22 de febrero, la conselleria de Compromís-PSPV decidió cerrar el expediente en 27 de las 29 especialidades convocadas, dejando fuera a Tecnología y Organización Comercial «a la espera de la finalización y firmeza de todos los procesos judiciales».
En el caso de Tecnología, los cinco aspirantes que denunciaron su exclusión por no ser titulados superiores han ganado en los tribunales el volver a ser incluidos en la lista, pero la Abogacía de la Generalitat ha recurrido la sentencia. Esto ha causado «malestar» en estos últimos 45 catedráticos de nunca acabar. «Vemos que nuestro nombramiento se posterga sin fecha y nos sentimos perjudicados con respecto al resto que ya son catedráticos», critica un afectado.
Por ello, solicitan al conseller de Educación, Vicent Marzà, que retire dichos recursos y que cierre el proceso cuando queda una semana que se cumplan los siete años de su inicio. Una solicitud que descarta conselleria con el argumento de que los que han entrado en la lista por ser licenciados tras ser excluidos diplomados e ingenieros técnicos «también reclamarían en los tribunales al verse desplazados», apuntan fuentes de la conselleria.
No obstante, el deseo de no agravar el embrollo judicial no se verá cumplido pues el colectivo de 45 eternos aspirantes a catedrático estudia presentar un contencioso-administrativo por mal funcionamiento de la Administración.
