La Comunitat Valenciana registra un gasto per cápita en alimentación de 1.450 euros al año, una cifra que es un 3,5 % inferior a la media nacional. Los autores del informe apuntan que «en función del gasto medio por persona, el poder de compra de los consumidores valencianos está un 7,2 % por debajo de la media nacional». Lo cierto es que el hecho de contar con salarios menores a la media —algo que también ocurre con las pensiones— limita las posibilidades de desembolso en productos tan básicos como la alimentación.

Al comparar las ediciones 2016 y 2015 del informe se confirma un aumento de 32 euros en el dispendio anual de alimentación en un año, seguramente causado por el alza de los precios.

j. l. llagües valencia