El extesorero del PP Luis Bárcenas declaró ayer ante el tribunal de la Audiencia Nacional que le juzga por la primera etapa de la trama Gürtel (1999-2005) que en 2008 el secretario general del PP Ángel Acebes permitió contratar con las empresas de la trama parte de la organización del Congreso que se celebró en Valencia ese mismo año. Un congreso que aupó a Mariano Rajoy a la presidencia del partido y cuya factura por valor de 568.511 euros sigue sin pagarse a Feria Valencia, el recinto que acogió el evento del PP.

Bárcenas explicó durante su declaración, que continuará hoy martes, que fue el propio Rajoy quien había decidido cuatro años antes, en 2004, cortar la relación del PP con las empresas del cabecilla de la Gürtel, Francisco Correa, tras ser avisado por el empresario Joaquín Molpeceres de sus actividades ilícitas. Se le informó de que cualquiera que quisiera contratar con determinados ayuntamientos de Madrid «tenía que pasar por su despacho» .

Tras el aviso, Bárcenas recibió órdenes de dar por finalizadas todos los contactos y que «no volviese a entrar» en la sede del partido. En la reunión en la que se decidió cortar relación con las empresas de Correa estuvieron presentes, además de Mariano Rajoy y Álvaro Lapuerta el entonces secretario general del partido, Ángel Acebes, según ha explicado Bárcenas ante el tribunal.

Tras esta decisión, el propio Bárcenas fue el encargado de mandar correos electrónicos a las sedes regionales del partido para informar de que ya no se contrataría más con las empresas de la Gürtel. Un correo al que sólo contestó el expresidente de la Comunitat Valenciana Francisco Camps, que llamó para avisar que él no trabajaba con Special Events -la empresa con la que Correa organizaba los actos del PP- , sino con otra empresa vinculada a este grupo, Orange Market, y que seguiría haciéndolo debido a la creatividad y ajustados precios que ofrecía su responsable Álvaro Pérez «el Bigotes», al que calificó como «un genio». Una afirmación que no es del todo cierta ya que, según se ha visto en el juicio de Fitur, todas las empresas de la Gürtel facturaban a la Generalitat. La estrecha relación entre «El Bigotes» y Francisco Camps también se desveló en las grabaciones policiales aportadas a la causa en la que el expresidente de la Generalitat califica a Álvaro Pérez de «amiguito del alma, te quiero un huevo».