Con el frío, las plantas y mascotas necesitan cuidados especiales. Aunque en principio las plantas de exterior resisten, Miguel Julià, de Vivers Albogarden, aconseja que estén «lo más protegidas del frío y del rocío», sobre todo las de «mucha flor», que se pueden cubrir con una tela transpirable -nunca plástico- o cambiar a una ubicación más resguardada a la intemperie. De forma «temporal» alguna planta, como el geranio, puede estar en casa, explica. Además, regar «amortigua el efecto del frío». Martín José Molina, vocal de la junta de gobierno del Colegio Veterinario de Valencia, recomienda sacar a los perros más pequeños -los más desprotegidos- con «abriguitos y trajecitos». También hay que ser más cuidadosos con el secado tras el baño y, en la nieve, proteger las patas con calcetines para evitar lesiones. Si el animal duerme fuera de casa, hay que ofrecerle aislamiento (una manta, por ejemplo).