Ante el mantenimiento de las alertas meteorológicas y de la ola de frío, las asociaciones que habitualmente asisten a las personas que no tienen hogar, ayer por la tarde volvían a prepararse para salir por la noche. Amigos de la Calle elaboraba comida, como explicó Yolanda Martín, y tenían previsto recorrer los barrios para detectar a quienes dormían en las calles. Su ruta comprendería, entre otras, la zona del estadio del Mestalla o el centro de la ciudad, donde saben que malviven personas en cajeros y parques. El objetivo es intentar que pasen la noche a cubierto o, si no acceden, suministrarles sopa y otros alimentos calientes, como café o chocolate, para hacer el frío más llevadero.
Realidad «chocante»
Amigos de la Calle cuentan con la colaboración de la Red de Solidaridad Popular, de Benicalap, que sirve de apoyo para la asociación. En este caso, además de recorrer la ciudad por la noche, los miembros de la red recogían mantas y ropa de abrigo donada por ciudadanos o por comercios de la ciudad. Estos voluntarios aseguran que, por desgracia, resulta «chocante» la cantidad de gente que hay en las calles, sin hogar. Además, lamentan que estos días muchos se esconden por miedo a la Policía -no conocen la labor que los agentes hacen en esta operación especial por el frío- y muchos otros se han quedado sin lo poco que tenían (como cartones u otros enseres personales, creen que como medida de presión para que busquen refugio).
Por su parte, en Ca la Mare ayer por la tarde ultimaban los últimos preparativos y se disponían a volver a la boca del metro de Túria, para asistir a los mendigos que se acercaran anoche hasta allí. A través de las redes sociales, hacen un llamamiento para que quien conozca a personas que están en situación de desamparo estos días, notifiquen su ubicación para poder ir a asistirles.
