Iberdrola ha enviado un helicóptero para supervisar varias de las incidencias en sus líneas eléctricas de alta y media tensión que han dejado sin luz a más de 32.000 personas en la comarca de Requena-Utiel y algunos puntos del Valle de Ayora y La Hoya de Buñol-Chiva.

La compañía había contratado dos helicópteros, ante la imposibilidad de acceder por carretera a esos puntos por culpa de la nieve, pero según han informado a Levante-EMV fuentes de la empresa, una de las dos aeronaves no ha podido despegar por culpa de las inclemencias meteorológicas.

El objetivo de los helicópteros es poder supervisar desde el aire los problemas que han provocado los cortes de luz para poder acometer las reparaciones lo antes posible una vez se restablezca el tráfico por tierra.

La incidencia más grave se ha producido en una línea de 132 kilovoltios en la zona de Contreras, pero la compañía ha reconocido que otras de menor capacidad también han colapsado, lo que ha incrementado las dificultades.

Muchos de los vecinos de la comarca de Requena-Utiel también se han quedado sin agua ya que las bombas para distribuir el líquido funcionaban mediante el sistema eléctrico.

Iberdrola también ha anunciado que ha movilizado ya a 300 empleados para subsanar las deficiencias y va a incrementar la dotación con trabajadores de otras regiones próximas así como 150 hombres procedentes de empresas contratistas. Asimismo, ya ha habilitado 23 grupos electrógenos y ha solicitado más para restablecer un servicio, que todavía no saben cuándo volverá a funcionar.