«Hemos luchado muchísimo por este derecho, y ya teníamos ganas de que llegara una sentencia que nos permita acceder a la prestación de maternidad». Así de feliz se mostraba ayer el valenciano Carles Berriales tras conocer la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) que reconoce por primera vez en España el derecho a las 16 semanas del permiso de maternidad a uno de los cónyuges de un matrimonio homosexual. Carles y su esposo son padres de una niña por gestación subrogada que está a punto de cumplir un año de edad.
Carles considera que el fallo del alto tribunal canario, que desea que se aplique también en el resto de autonomías, «es un avance grandísimo en nuestros derechos como padres». Esta opinión es compartida por otros padres valencianos por gestación subrogada, como es el caso de Denis Zamaro, que tiene dos hijas, una de tres años y la otra que pronto cumplirá uno. «Estamos ante un avance muy bueno, porque se nos estaba negando el derecho a tener cuidado de un recién nacido en los primeros meses, un período en el que ni siquiera las guarderías aceptan a bebés tan pequeños».
Tanto Denis y su marido, como Carles y su pareja, para cumplir su sueño de ser padres han recurrido a la gestación subrogada en EE UU, donde esta técnica de reprodución asistida conocida popularmente como vientre de alquiler es una figura regulada por ley y válida en Estados como Illinois o California.
Denis explica que «hay muchas parejas en España con hijos de gestación subrogada que han solicitado la prestación de maternidad y sistemáticamente el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) lo deniega». Con esta negativa, añade «se está privando de un derecho no sólo al trabajador, sino al niño, pues en definitiva es el bebé el que tiene derecho a ser protegido y cuidado durante los primeros días de su vida».
Es precisamente el «interés superior del menor» el pilar jurídico en el que se basa la sentencia del alto tribunal canario para dejar sin argumentos al INSS, que denegaba la prestación al entender que la actual regulación legal de la maternidad en España no incluye los supuestos de nacimientos derivados de gestación subrogada, al tratarse de una figura prohibida en nuestro país.
El padre demandante ya ganó en primera instancia, pero el INSS recurrió la sentencia y ahora el TSJ de Canarias reconoce las prestaciones reclamadas primando el «interés superior del menor» y «la inscripción registral válida del mismo que no fue impugnada».
«Yo no solicité el permiso de maternidad por no ir a los tribunales, pues muchas parejas que conozco se han gastado bastante dinero en abogados y siempre les era denegada la solicitud», explica Carles. «A mi me hubiera venido de maravilla, pues los primeros meses son muy complicados», apunta.
Denis, al pertenecer a una mutua, si que ha podido acceder al permiso de maternidad en las dos veces que ha recurrido a la gestación subrogada.
Tanto Carles como Denis coinciden en que «la lucha final» es que en España se reconozca la gestación subrogada. «Con todas las garantías que haga falta y mediante una ley bien hecha», recalca el primero. Denis, miembro de la asociación Son nuestros hijos, subraya que «es muy costoso emocionalmente y económicamente tener que ir a
EE UU para tener un hijo y no todo el mundo puede permitírselo».
