El temporal de nieve y agua, y el corte de los servicios básicos, ha afectado a miles de viviendas de Requena-Utiel, pero también ha paralizado prácticamente la economía de la comarca. Ayer, por ejemplo, la bodega Pago de Tharsys colgó en las redes sociales una bonitas fotos de sus viñedos repletos de nieve acompañadas por el texto «seguimos aislados». Y según sus responsables, no ha sido la única de la zona que en la tarde de ayer seguía sin suministro eléctrico y con los accesos poco transitables. «Efectivamente, seguimos sin luz ni agua y hemos querido avisar a la gente que tenía pensado venir —explicaba ayer Rebeca García, responsable de marketing—. Hemos tenido que anular las reservas de las cinco habitaciones que tenemos y cancelado las visitas. Aún así, han venido unas personas desde Castelló y les hemos ofrecido un vino de cortesía». Por suerte, García asegura que la nevada solo ha afectado a la parte del negocio de la empresa relacionada con el alojamiento y las visitas, pero no al de la producción de vino. «Los viñedos ya están en estado larvario, y la nieve es incluso buena porque mata los microorganismos del suelo. Y en cuanto al vino de la bodega, la evolución es un poco más lenta pero tampoco le afecta».