El exconcejal y diputado no adscrito en las Corts, Miquel Domínguez, ha asegurado a las puertas del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que «yo pagué los mil euros, pero nadie me los devolvió». Domínguez ha declarado como imputado por el presunto pitufeo o blanqueo de capitales en pequeñas cantidades supuestamente cometido por el grupo municipal popular en la campaña electoral municipal de 2015 dentro de la instrucción que se practica en el TSJCV contra él por su condición de aforado.

Domínguez asegura estar «tranquilo» porque «siempre he defendido mi inocencia» tras comparecer ante la instructora de la investigación del Caso Taula que realiza el TSJCV y el Fiscal Anticorrupción durante una hora. El actual diputado no adscrito, anteriormente en el PP, también ha asegurado desconocer cualquier detalle sobre la recogida de información óque la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil realiza desde ayer en varias fundaciones del Ayuntamiento de Valencia relacionadas con la presunta financiación irregular de la campaña electoral del PP de Valencia en 2007, en la que la entonces alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, logró su techo electoral. «Desconozco cualquier asunto sobre ese detalle porque ya no vivo en Valencia», ha asegurado Domínguez brevemente a la salida de su declaración.

Durante la mañana de hoy también ha declarado como testigos ante el TSJCV la exconcejala del PP de Valencia, María José Alcón, quien admitió el presunto blanqueo en una conversación telefónica grabada por la UCO durante la investigación, además de la secretaria del grupo municipal popular, Mari Carmen García-Fuster y dos asesoras del PP en el momento de los hechos.