Más de 300 docentes y expertos de diversas disciplinas han participado este sábado en la II Jornada por la Convivencia en el Aula, celebrada en el Centro Deportivo y Cultural La Petxina de València para abordar la problemática del acoso escolar desde ámbitos como el neurocognitivo, educativo, legal o psicológico, y compartir recomendaciones sobre cómo acompañar a los jóvenes que lo sufren y a su entorno.

La cita, una iniciativa de Loftalento y Fundación Edukar, ha tenido como objetivo abordar de forma multidisciplinar cómo generar nuevos patrones de actitud ante el acoso escolar, según ha informado la organización del evento en un comunicado.

Una de las profesionales que ha intervenido en la jornada, la experta en 'coaching' de desarrollo y en liderazgo Ascensión Garrido, ha incidido en la necesidad de que padres y profesores trabajen con las emociones de los niños, tanto en casa como en la escuela, para ayudar a prevenir el acoso escolar.

Garrido ha defendido abordar la problemática desde una "visión sistémica" en los jóvenes a través de los "principios de orden", así como que "se les respete" en términos de antigüedad, jerarquía y responsabilidad. Para ello, ha recomendado la educación en base al principio de contribución, "que se reconozca lo que hacen y que no reciban ni más ni menos de lo que merecen", y de inclusión, "para que puedan aportar lo que les hace diferentes".

"A veces, el objetivo del programa educativo no deja espacio a la atención de cada niño y de cada conflicto, sin el cual no habría metas que cumplir", ha lamentado Garrido, al tiempo que ha insistido en que "el trabajo con las emociones de los niños debe tener su lugar en las clases".

Diferenciar entre conflicto y acoso

Por su parte, el neuropsicólogo José Mazón ha explicado la problemática en el aula desde la perspectiva de las neurociencias para resaltar que "lo importante del cerebro se encuentra en el sistema límbico, el de la empatía y las emociones. Además, ha indicado que "los profesores deben inspirar a los alumnos, que han de ser un reto para ellos y no un problema".

En una mesa redonda, el profesor de la Universitat de València Carlos Caurín ha remarcado la importancia de la figura del mediador escolar, que debe "discernir entre lo que es un conflicto residual y una verdadera actividad de acoso", que ha explicado que se da cuando hay una desigualdad de poder manifiesta entre la víctima y el acosador y cuando la situación se prolonga en el tiempo y en el espacio o en las redes sociales.

Desde el ámbito legal, la coordinadora de la Sección de Menores de la Fiscalía Provincial de València, Consuelo Benavente, ha subrayado que el niño que agrede "también es una víctima" que debe ser tratada con programas de resolución de conflictos antes de tener que llegar al juzgado.

Responsabilidad en RRSS

Asimismo, la policía nacional y experta en 'coaching' Carmen Úbeda ha puesto el acento en prevenir el acoso desde la información en las aulas para que "los alumnos sepan lo que es y por qué no debe ejercerse", así como en la necesidad de enseñarles a utilizar las redes sociales de manera responsable.

La cofundadora de Loftalento y Fundación Edukar Ahora, Mª Carmen González, ha definido el problema del acoso escolar como un "reto prioritario" del que padres y profesores deben ocuparse teniendo en cuenta que no solo hay una forma de actuar sobre ello, y que "deben comprometerse a solucionarlo con tolerancia a la incertidumbre, responsabilidad compartida y capacidad de análisis".

Las ponencias de la tarde han puesto el foco en las interferencias que impiden que exista una vinculación entre alumnos y profesores en el aula y en los conflictos transformados en soluciones desde el sistema constructivista de resolución de problemas, entre otros temas.