La Fiscal portavoz de la Fiscalía de Valencia, Susana Gisbert, ha defendido esta tarde en el Senado que "la educación es la vacuna contra la violencia de género". Gisbert ha comparecido esta tarde en la Comisión de Nombramientos del Senado junto a cinco de los quince aspirantes propuestos por los parlamentos autonómicos para cubrir los cuatro puestos de magistrado del Tribunal Constitucional que debe renovar la Cámara Alta.

La fiscal valenciana ha explicado durante diez minutos -el tiempo que tenían estipulado los candidatos- su extenso currículum, que se inició con su ingreso en la carrera fiscal en 1992, y que desde 2004 se especializado en la lucha contra la violencia de género, tras crearse los juzgados especializados para la lucha contra la violencia contra la mujer. Una tarea en la que no "he dejado de lado otros aspectos de la jurisdicción penal, civil o mercantil". En esta última materia, Gisbert recordó que la interenciópn de oficio de la Fiscalía permitió la retirada de la publicidad sexista en varias campañas de Cementos La Unión y Bankia.

En el turno de preguntas, la portavoz de ERC, Mirella Cortés, ha planteado las mismas cuestiones a todos los candidatos; una de ellas, si ven posible que el Gobierno delegue a Cataluña la competencia para organizar una consulta popular por vía de referéndum. Y de los seis, cuatro candidatos -entre ellos Gisbert- han respondido que esa posibilidad no cabe en la Constitución, salvo que sea reformada. "Transferir las competencias con la Constitución no es posible, pero se puede arbitrar el mecanismo de la reforma consitucional para permitirlo", respondió la Fiscal portavoz valenciana a la diputada de ERC. Sobre la militancia en un partido, Gisbert respondió a Cortés que nunca ha militado en ninguna formación política porque la ley no lo permite a los fiscales y se mostró partidaria de que también se regule esta posibilidad para los magistrados que aspiren a formar parte del Tribunal Constitucional.

Por último, el portavoz de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, Ramón Espinar, reconoció a todos los candidatos un currículum "brillante" y que son aptos para ser miembros del TC. Aunque aseguró a Susana Gisbert que "oportuna, porque uno de los problemas fundamentales de nuestra sociedad es la violencia de género, porque es una epidemia. Su defensa de la vida le debería caber a nuestro Constitucional, si quiere afrontar los retos de nuestra sociedad".

Aunque acto seguido Espinar ha asegurado a los seis candidatos que "no van a tener opciones porque hay un acuerdo de PP y PSOE sobre qué cuatro nombres serán elegidos y no les incluye: Les hacen a ustedes venir, nos da la oportunidad de conocerles, estoy agradecido, pero no va a tener más utilidad".

Una afirmación que obtuvo la inmediata respuesta de los representantes del PP y PSOE, José Manuel Barreiro y Vicente Álvarez Areces respectivamente, han defendido que serán las deliberaciones de la comisión las que decidan qué candidatos son más adecuados y han rechazado el comentario de Espinar. Ambos aseguran que el Senado decidirá tras escuchar a los 15 aspirantes y que nada está ya cerrado. "Cualquier otra apreciación no se corresponde con la realidad", ha dicho el portavoz del PP.

En el Pleno del Senado de la semana aprobará la lista de cuatro nombres por mayoría de tres quintos. Dada esta mayoría reforzada, PP y PSOE negocian un acuerdo que todavía no ha sido anunciado. Dos de los nombres que formarían parte de este pacto comparecerán mañana ante la comisión: la catedrática de Derecho Constitucional por la Universidad de Málaga María Luisa Balaguer, la candidata respaldada por Susana Díaz, y el del exfiscal general del Estado Cándido Conde-Pumpido, según informa la agencia Europa Press.